CRISIS DEL CORONAVIRUS
Los estudios de tatuajes gaditanos donan sus materiales a los hospitales
Un centro de Jerez de la Frontera ya ha hecho entrega de 2.000 guantes, mascarillas y productos desinfectantes
Una de las trabajadoras de Pol Tattoo reúne materiales para su entrega en el hospital
La propagación del coronavirus COVID-19 continúa desenfrenada en nuestro país. Los casos de contagiados se incrementan cada a nivel nacional, regional e incluso provincial. De ahí que los hospitales y los centros de salud de la provincia de Cádiz se estén viendo en serias dificultades a la hora de adquirir algunos materiales fundamentales para el desempeño de su trabajo son las mascarillas.
Desde que el Ministerio de Sanidad hizo un llamamiento a la ciudadanía, han sido varios los estudios estudios de tatuajes gaditanos los que han puesto a disposición su material para que pueda ser empleado y utilizado por el personal sanitario y trabajar así con ciertas garantías de prevención y protección para reducir al máximo el riesgo de contagio.
Pol Tattoo es un claro ejemplo de responsabilidad, solidaridad y colaboración. Este estudio de tatuajes de Jerez de la Frontera ya ha entregado al hospital de la ciudad unos 2.000 guantes de nitrilo, productos desinfectantes y mascarillas , a día de hoy el bien más preciado y escaso prácticamente en todo el país.
«La idea es que todos los estudios de la provincia se sumen a la iniciativa, colaboren en estos momentos y aporten sus materiales », ha explicado a este periódico Samuel Martínez, uno de los tatuadores de este centro.
Este ofrecimiento que hicieron a través de Twitter fue rápidamente replicado y compartido por centenares de usuarios. Más de 810 retuits y más de 2.000 'Me gusta'. Fue precisamente la hija de una enfermera del Hospital de Jerez quién vio esta publicación donde se ofrecían camillas plegables, desinfectantes, guantes y material para esterilizar y lo puso en conocimiento de su madre. A partir de ahí, se pusieron en contacto y quedaron para realizar la entrega. Eso sí, guardando la distancia la seguridad entre ellos.
Desde Pol Tattoo se han puesto en contacto con otros estudios de tatuajes de la provincia que también han seguido el ejemplo. Tiene mérito cuando se trata de un gremio al que le afecta especialmente esta crisis del coronavirus.
Martínez reconoce que la situación para los tatuadores será complicada incluso cuando todo vuelva a la normalidad: «Después del coronavirus, seguro que la gente tardará en volverse a tatuar. Es algo muy cercano, de mucho contacto físico, y seguro que persiste cierto miedo. Nuestro gremio está bien jodido. Tatuarse es un dinero y un capricho. Después de esta crisis, a ver quien tiene 500 euros para gastarse en un tatuaje».
Cinco personas trabajan en este estudio jerezano ubicado en la urbanización Las Adelfas. Como tantos establecimientos y negocios, el Estado de Alarma les ha obligado a echar el cierre por tiempo indefinido.
Durante este tiempo, los cuatro tatuadores se están dedicando a realizar diseños desde casa mientras que la recepcionista atiende y responde emails desde su teléfono móvil. No queda otra que adaptarse a la situación . Y es que en apenas una semana, la vida y las rutinas de la gran mayoría de la población gaditana ha dado un giro de 180º.
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