Los empresarios jóvenes gaditanos exigen paso

«La distinción es clara: los jóvenes empresarios no queremos subvenciones, queremos ayudas en la financiación , queremos que nos dejen trabajar ». Daniel Sánchez, el presidente de la Asociación de Jóvenes Empresarios de Cádiz tiene las cosas muy claras. Hay empuje en la provincia, hay talento, pero falta ese apoyo que hace que se pueda subir el primer escalón.

Los empresarios más jóvenes de la provincia piden colaboración y, además, que se les tenga más en cuenta a la hora de tomar decisiones económicas sobre el futuro de la provincia porque «somos nosotros los que, en el día a día, sabemos qué necesita Cádiz».

El aspecto en el que hace más hincapié Sánchez es en el de la financiación. «La situación se repite muchas veces. Un joven tiene una idea que puede prosperar, pero se encuentra con que el banco le exige para financiarle unos avales, como el patrimonio familiar, que lo colocan entre la espada y la pared; si a eso se suma el precio de los alquileres que hay en Cádiz y la carencia de incubadoras de empresas, la situación se vuelve dramática», detalla Sánchez, que lamenta que en los últimos meses emprendedores de la provincia han vendido sus empresas a grupos de fuera «porque aquí apenas tenían apoyo ».

«Es una pena porque hay talento y se está innovando . De las 60 empresas auxiliares que colaboran con Navantia, unas 20 están dirigidas por jóvenes empresarios, que están también muy presentes en el sector agroalimentario y que han contribuido a que Cádiz sea, hoy por hoy, la provincia líder en exportaciones», relata el presidente de AJE que, además, echa en falta que en el sistema educativo se introduzcan materias encaminadas a enseñar a emprender. «Tenemos muchos casos de jóvenes que terminan su FP o su carrera, incluso en LADE, y n o saben qué hacer ».

Esfuerzo por a ctualizar la cultura del emprendimiento no le falta a AJE, que este septiembre cumplirá 20 años en la provincia. En los últimos meses ha impartido talleres para que las empresas sepan cómo manejar las redes sociales de una manera productiva e, incluso, cómo sacar provecho al fenómeno de los influencers . «Pero queda mucho por hacer, sobre todo, resta que la sociedad no siga viendo al que quiere emprender como un enemigo, sino como a alguien que ha venido a generar empleo y riqueza».