Desde el Elcano, en demanda de España, más de cinco meses después

Desde el Elcano, en demanda de España, más de cinco meses después

Cuatro gaditanos de la dotación del buque escuela de la Armada Española cuentan cómo se sienten teniendo por la proa su inminente llegada a casa

Ya han pasado más de cinco meses y medio desde que en la mañana del 13 de enero el buque escuela de la Armada Española, Juan Sebastián de Elcano, iniciase su 91 crucero de instrucción. A bordo, 250 almas, entre dotación y guardamarinas, que se despedían para seis meses de su tierra y sus seres queridos. Ahora, cuando el bergantín-goleta ha iniciado el regreso a casa tras zarpar de Kiel el 24 de junio, hablamos con tres miembros de la dotación y un guardiamarina sobre su experiencia y la ‘mochila’ con la que arribarán en el puerto de Guetaria, en el País Vasco, el próximo día 6 de julio.

Tienen ganas de llegar a la ciudad española, «es uno de los grandes hitos de este 91 crucero de instrucción, ya que nos permitirá hacer un sentido homenaje al vasco de Guetaria que culminó la primera vuelta al mundo», declara el capitán de corbeta Carlos A. Aragón Gómez, tercer comandante y jefe de estudios del buque escuela, nacido en San Fernando hace 41 años. «Será un recuerdo inolvidable para todos aquellos que vestimos el botón de ancla, especialmente para los guardiamarinas. El participar en la conmemoración del V centenario de esta empresa universal genuinamente española sin duda será el colofón a un crucero de instrucción en el que esta efeméride ha estado muy presente en todos los puertos que hemos visitado», cuenta.

Llegarán a la ciudad donde nació Juan Sebastián de Elcano con el «gran honor de poder formar parte de la dotación de buque que lleva su nombre. Así como poder visitar y ser partícipe de todas las actividades previstas en su honor», afirma el sargento Francisco José Trujillo Porras, nacido en Cádiz hace 36 años.

El capitán de corbeta Carlos A. Aragón, tercer comandante del Elcano. Foto: Armada Española

Será el primer puerto español tras casi seis meses de navegación. Un periplo en el que, por primera vez, el buque escuela de la Armada ha visitado Polonia. «Szczecin nos recibió muy bien, estaban muy agradecidos con nuestra visita», cuenta la marinero María Valle Gil, de 21 años y nacida en El Gastor.

Ha sido un viaje de contrastes, de América al norte de Europa. «Es lo que esperábamos, conocer el cálido Mar Caribe, el Atlántico Norte y los mares del norte por los que navegamos actualmente, de los cuales me he sorprendido con su belleza y tranquilidad», declara el guardiamarina Juan José Fernández Fernández, de Benamahoma. Diferente clima, «diferentes culturas, pero siempre recibidos con un gran cariño allá donde vayamos. Aunque los puertos de América muestran un mayor acercamiento hacia nosotros que los de Europa», señala el capitán de corbeta Aragón.

El guardiamarina Juan José Fernández. Foto: Armada Española

Amistad en la mochila

Han pasado más de cinco meses desde que zarparon de Cádiz y aseguran que el tiempo se ha pasado rápido, «aunque ahora en el final me está costando un poco más, ya que es mucho tiempo alejada de tu familia y de tu entorno», declara la marinero de maniobra Valle.

El sargento Trujillo es el jefe del grupo de mantenimiento de Fuerza, Generadores y Alumbrado y declara al respecto que «cuando estamos navegando montamos turnos de vigilancias en la central de máquinas controlando que todo funciona correctamente, realizamos ejercicios de seguridad interior en los que nos adiestramos para poder atacar eficazmente algún incendio o inundación que se pudiera producir a bordo y cuando llegamos a puerto, podemos disfrutar de los días que estemos atracados. Así que estos meses se hacen amenos por la diversidad de actividades que realizamos tanto en la mar como en puerto».

El sargento electricista Francisco José Trujillo. Foto: Armada Española.

Ahora «somos un equipo mucho más cohesionado», asegura el jefe de estudios. Los guardiamarinas han pasado por las fases de adaptación y aprendizaje y se encuentran en la de responsabilidad. «Hemos adquirido multitud de conocimientos», dice el guardiamarina Fernández.

Todos han vivido «maravillosas experiencias», en palabras del sargento Trujillo, como el cruce a vela del Atlántico o el homenaje a Blas de Lezo en Cartagena de Indias. Pero, sobre todo, en la mochila traen algo tan valioso como intangible y que pone de relieve la marinero Valle, «la amistad de mis compañeros».

La marinero de maniobra María Valle Gil. Foto: Armada Española.

6 thoughts on “Desde el Elcano, en demanda de España, más de cinco meses después

  1. Habéis participado en una aventura maravillosa ahora toca volver a casa, un aplauso para todos vosotros en concreto para una persona que está ahí con vosotros que es especial para mi y deseando que ya vea a su mujer y su hijo☺️, y muchas gracias por tenernos informados

  2. Respeto, honor y gloria a todos vosotros los que defendéis, incluso con vuestras vidas, la patria ESPAÑA de ese cáncer que tenemos, el separatismo anticonstitucional del norte y del este de la península, por decirlo claro, del país vasco y de Cataluña sobretodo teniendo en cuenta que hay muchos españoles allí patriotas y que esos separatistas buscan el poder y con ello el dinero que, estúpidamente les da el vacilante actual gobierno.

  3. Emocionado, como mucha gente de este pequeño pueblo, cuando vemos a este chico guardiamarina, Juan José Fernández, haciéndose un hombre de provecho en nuestra armada. Procedente de una familia humilde y trabajadora que ha luchado por que su hijo estuviera donde quería. Los tres lo han conseguido. Un gran abrazo para ellos.

  4. Leo los artículos que escribís sobre el Elcano y su tripulación y me conmueve ver que aún quedan personas con los pies en el suelo, la cabeza sobre los hombros y el corazón tan grande que además de llevar a todos sus seres queridos y su profesión le cabe el amor a su patria. Enhorabuena y mucha suerte a todos los que “viajais en el mismo barco” luchando por un misma causa. SALUDOS.

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