VIOLENCIA DE GÉNERO
Continúan en estado muy grave las mujeres tiroteadas en Jerez por la pareja de una de ellas
La madre ha sido trasladada al hospital Puerta del Mar de Cádiz donde fue operada de urgencia
Las dos mujeres tiroteadas el pasado viernes en Jerez en plena calle continuan en estado muy grave, según confirman fuentes del SAS en Cádiz. La que peor pronóstico presenta es la que fuera pareja del agresor, que sigue en la UCI del Hospital de Jerez . La joven de 33 años es natural de Ubrique, como su madre, de 64, que también fue alcanzada por los disparos y hubo que trasladarla al Puerta del Mar de Cádiz para intervenirla.
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El agresor, de 41 años, t erminó suicidándose de un disparo en la cabeza ante los vecinos que fueron testigos del terrible suceso. Las dos mujeres llevaban viviendo en la ciudad jerezana desde hacía aproximadamente un año en la calle Molinos de Viento, en el pleno barrio de San Miguel, próximo al casco histórico. Según explicaron varias vecinas que presenciaron la escena, todo ocurrió en cuestión de minutos, cuando el hombre llegó en un todoterreno y acto seguido disparó con una escopeta de caza a su exmujer en el estómago y a la madre de ésta, en el hombro y en el tórax.
Una vida truncada
Tras la separación del matrimonio, madre e hija habían decidido dejar Ubrique donde residían para comenzar una nueva vida. Pero no había un historial conocido de malos tratos , según fuentes policiales y del Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) no existían denuncias previas por presuntos malos tratos o violencia de género ni orden de alejamiento por lo que en este caso no se había activado ningún tipo de protocolo de protección a la víctima, desconociéndose por tanto si anteriormente la mujer había sido víctima de malos tratos.
Aunque llevaba alrededor de un año en Jerez no se había mudado al número 8 de la calle Molino de Viento hasta hace aproximadamente un mes, por lo que a los residentes de este edificio de apartamentos humildes apenas les había dado tiempo a conocerlas. Los testigos confirmaron que era la primera vez que veían al hombre , que había realizado recientemente un curso de guarda forestal, según ha podido saber este medio.
Según los residentes unos minutos antes habían estado haciendo arreglos en la casa junto al responsable del edificio y tras acabar la faena el hombre salió y después lo hicieron las víctimas que se toparon con el agresor.
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