SANIDAD

Los conductores de ambulancias de Cádiz inician una huelga indefinida para pedir mejoras laborales

Denuncian que pese a que la concesión es «millonaria» llevan años con el sueldo congelado

22/10/2018
Actualizado a las 19:22h.

Los conductores de las ambulancias en la provincia de Cádiz han iniciado una h uelga indefinida para reivindicar mejoras laborales tras discrepancias con la empresa adjudicataria Servicios Sociosanitarios Generales (SSG).

Según ha indicado el sindicato UGT en un comunicado, los conductores de las ambulancias «se han visto abocados a recurrir a la huelga ante la nula voluntad negociadora que la empresa adjudicataria» la cual «aún no ha firmado la adjudicación del contrato de ambulancias de la provincia y que está provocando un grave trastorno a toda la ciudadanía gaditana» .

Para el sindicato, resulta «vergonzoso» que «tras años de congelaciones salariales, descuelgue de convenio y nulas subidas , nos encontremos ante una concesión millonaria que no suponga ningún avance en el Convenio Colectivo».

Por ello, UGT ha pedido a la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía que « tome cartas en el asunto» para solucionar este conflicto laboral y no siga permitiendo que «estos empresarios maltraten a unos trabajadores sin que se haga nada por evitar que grandes presupuestos, con concesiones millonarias, vayan a parar a las arcas de empresas que solo quieren beneficios a costa de machacar a sus empleados».

CSIF exige a la Junta que garanticen los derechos laborales de la plantilla de operadores del 061

La sección sindical de CSIF en la sala de la provincia de Cádiz del servicio de emergencias del 061 ha remitido un escrito a la Junta de Andalucía denunciando «los perjuicios que la empresa concesionaria, Konecta, está ocasionando a los trabajadores con sus últimos cambios operativos». Así, desde CSIF se exige a la Administración autonómica, como responsable último de este servicio público, «que garantice los derechos laborales, económicos y sociales que la empresa ha ido menoscabando, incumpliendo de manera reiterada el pliego de condiciones».

Concretamente, la plantilla de Konecta, ubicada en Puerto Real, ha decidido eliminar de forma unilateral las guardias localizadas, con lo que los operadores han visto reducido su salario significativamente. Asimismo, la empresa «considera los permisos retribuidos como absentismo y tampoco respeta los permisos para hacer exámenes, que era un derecho adquirido». Esta situación ocasiona «un ambiente de presión a la hora de gestionar las llamadas de emergencias, pudiendo repercutir en la agilidad y operatividad de la sala de coordinación».