Relevo en Diputación
Cambio de ciclo en Diputación con el cese de Irene García como presidenta
Pasa el testigo a Ruiz Boix este viernes tras siete años al frente de la institución provincial para dedicarse a su nueva labor como parlamentaria
Un beso y un abrazo oficializan una aparente reconciliación política después de una dura batalla por el liderazgo
La presidenta de la Diputación, Irene García , y el secretario provincial del PSOE y vicepresidente de la Diputación, Juan Carlos Ruiz Boix , han formalizado este martes con un abrazo y un beso el cambio de ciclo en la Diputación de Cádiz, que será oficial en el Pleno del próximo viernes. Irene García ha presentado por escrito este martes su renuncia a la presidencia de Diputación tras salir elegida el 19-J parlamentaria autonómica por Cádiz. Ambos cargos son incompatibles. García mantendrá su acta de diputada provincial hasta el pleno del viernes, en el que será investido presidente, Juan Carlos Ruiz Boix. Igualmente, Irene García seguirá con su acta de concejal en el Ayuntamiento de Sanlúcar. El sustituto de García en la bancada socialista de Diputación será el actual alcalde de Sanlúcar, el socialista Víctor Mora .
Irene García ha hecho balance de sus siete años al frente de la Diputación y ha destacado que llegó en 2015 a una institución cerrada por el gobierno del PP y que se ha logrado abrir con transparencia a ciudadanos y a los municipios.
Con la salida de Irene García del Gobierno provincial se pone fin a una etapa que comenzó en 2015 con el triunfo municipal del PSOE en la provincia . En 2013, García dejó la alcaldía sanluqueña para centrarse en el partido como secretaria provincial, aunque mantuvo siempre su acta de edil, que le permitió seguir en la Diputación hasta lograr su presidencia tras las municipales de 2015. García ha sido alcaldesa de Sanlúcar entre 2007 y 2013.
Ha reconocido este martes tener una mezcla de sensaciones tras siete años en la presidencia, «pero inicio ahora un nuevo camino y el año que viene cumpliré 20 años como concejala de Sanlúcar». Avanza que la tarea como parlamentaria es nueva al cambiar el chic municipal por un proyecto distinto. Insiste en que su salida no ha sido obligada y reconoce que en todo noviazgo y matrimonio, en clara alusión a la relación con su compañero Ruiz Boix, hay diferencias, discusiones y reconciliaciones .
La división
García concurrió a las autonómicas del pasado 19-J como cabeza de lista de la candidatura socialista por Cádiz tras una etapa de convulsiones en el seno del partido. Los acontecimientos se precipitaron a raíz del congreso regional del PSOE de Andalucía en noviembre de 2021, donde había que posicionarse por Espadas o seguir con Susana Díaz . Mientras buena parte del socialismo gaditano cambiaba el rumbo y se postulaba a favor de Espadas, el delfín de Sánchez en Andalucía, otros, caso de Irene García, mantenían su fidelidad a Susana Díaz . Sin embargo, esta posición de afinidad a Susana Díaz la cambió Irene García a última hora en favor de Espadas, pero ya Ruiz Boix, que había hecho lo mismo meses antes, había ganado terreno y apuntaba a disputarle la secretaría provincial del partido para seguir escalando posiciones hasta la presidencia de Diputación. Así ha sido.
Irene García ha recordado este martes que el PSOE llegó hace siete años a una Diputación que «estaba cerrada a cal y canto a la ciudadanía». Asegura que no había trato con los alcaldes y, por ello, convocó, nada más asumir la presidencia, un Consejo de Alcaldías, «que hoy es un órgano imprescindible para trabajar con todos los ayuntamientos de Cádiz». Asegura que este Consejo es hoy un elemento imprescindible, al mismo tiempo que ha recordado que el papel de la Diputación ha sido clave para la economía gaditana.
La todavía presidenta de la Diputación ha destacado que la institución provincial es hoy más abierta y ha ganado en consenso y diálogo . En este sentido ha comentado que «cuando llegamos, su presupuesto era muy pequeño y su nivel de ejecución bajo». Señala que su hoja de servicio es bien distinta a la que heredó en 2015.
La pandemia ha puesto a prueba a la institución y considera que ha estado a la altura de las circunstancias para rediseñar un nuevo presupuesto y afrontar las necesidades sociales y sanitarias que ha provocado el coronavirus en Cádiz .
En materia política, García ha destacado la etapa de consenso que ha vivido durante su mandato Diputación con la aprobación de la propuestas por mayoría y ha recordado que el último presupuesto salió adelante sin ningún voto en contra.
Inversión y empleo
El empleo y la inversión han sido las claves de la gestión política de la Diputación con más de 1.000 millones de euros invertidos en estos años . La parte social también ha sido determinante con la creación de un área de Igualdad y la cobertura con recursos propios de la ayuda a domicilio.
García se ha despedido de su cargo como presidenta con un extensivo agradecimiento a todos los agentes sociales que han trabajado con la Diputación, a todos los alcaldes y a la plantilla de funcionarios que mueven la institución. Deja la Diputación para incorporarse al Parlamento con una frase «Lo mejor está por venir» .
Augura que el PSOE seguirá al frente de la Diputación después de mayo de 2023, «porque las municipales las ganará el PSOE y también las próximas generales».
Una de las espinitas que se lleva es Valcárcel y adelanta que será uno de los objetivos en los que se seguirá trabajando. Aclara que la inversión de la Junta para sacar adelante el proyecto universitario es ridícula: 40 millones. Dice que no es lógico que un Gobierno con superávit y el anuncio de 280 millones para un nuevo hospital en Málaga no tenga 40 millones para convertir Valcárcel en facultad de Educación. Cree que el proyecto de Valcárcel puede tener encaje en los fondos europeos.