COMPAÑÍAS DE SEGUROS

Cádiz vuelve a despuntar por sus trampas a las compañías de seguros

La provincia incrementa su tasa de fraude y, junto con Melilla, Almería y Málaga, lidera el ránking nacional de la picaresca

Los últimos temporales han disparado las demandas sobre supuestas goteras en las viviendas

Peritaje de un vehículo para definir el valor del arreglo del siniestro LA VOZ

Javier Rodríguez

La picaresca vuelve a instalarse en Cádiz a la hora de engañar a las compañías de seguros. La provincia, junto con Almería y Málaga, es donde mas se ha incrementado el fraude . De hecho, la tasa gaditana es del 4,44% frente a la media nacional, que es del 2,21%. ¿Por qué? La incidencia que tiene la situación económica de cada provincia guarda mucha relación con la picaresca. Una mayor renta per capita está ligada a menos casos de fraud e , como ocurre con las tres provincias del País Vasco -Álava, Vizcaya y Guipuzcoa-, además de Barcelona que, junto con Madrid, se encuentran entre las zonas con menor tasa de fraude.

En paralelo, las zonas con tasas de desempleo más altas , como ocurre con varias provincias de Andalucía, caso de Cádiz, con una tasa de paro del 25%, presentan una tasa de fraude mayor a la media nacional .

Otro factor que explica las diferencias es el tamaño. En aquellas zonas más pobladas hay una mayor actividad de las tramas mafiosas. En la comunidad de Madrid, con más de seis millones de habitantes, un repunte de la actuación de estas tramas pasará más inadvertido que si ocurre en una provincia pequeña.

Estos son algunos de los datos que recoge el último informe estadístico elaborado por AXA cuyas conclusiones se concentran en el denominado ‘VIII Mapa del Fraude al Seguro en España’ . La tasa de fraude al seguro detectado en España creció en 2020 hasta el 2,2%, frente al 1,9% que registró en 2019, según las conclusiones del estudio. Este repunte ha tenido lugar en uno de los contextos sociales y económicos más complejos de la historia reciente del país, consecuencia de la pandemia de Covid19. De hecho, añade el informe, la crisis económica va a crear unas condiciones que podrían generar un aumento de los casos de fraude al seguro . En  los años posteriores a la última crisis económica, los intentos de fraude al seguro, especialmente los ocasionales, se multiplicaron por dos. 

Arturo López-Linares, director de Siniestros de AXA España, considera que «aunque la inmensa mayoría de los clientes son honestos, sabemos que algunas personas que atraviesan dificultades económicas pueden verse tentadas a cometer un fraude al seguro algo que, debido a las técnicas  periciales, es hoy más difícil que nunca». «En 2008 vimos como las tasas de detección de fraude al seguro se duplicaban, algo que podría volver a intentarse en los próximos meses» .  

La crisis sanitaria está derivando en una recesión económica de la que se tardará un tiempo en salir. La profunda caída del PIB, el fuerte incremento del déficit público, el aumento de la tasa de paro y la reducción de la confianza del consumidor derivada de la Covid19 va a crear unas condiciones que,  podría trasladarse, como en ocasiones anteriores, a un aumento de los casos de fraude al seguro .

De  hecho, en los años posteriores a la última crisis económica de 2008, los intentos de fraude al seguro se multiplicaron por dos. No obstante, el escenario ahora es diferente ya que, si las previsiones económicas se cumplen, la economía española volverá a crecer en la segunda mitad del año  mejorando las perspectivas y relajando la tensión sobre, especialmente, el fraude ocasional .  

Las dos crisis de la última década han sido clave a la hora de tentar a los ciudadanos a cometer un engaño

Por otra parte, a diferencia de la última crisis económica, en la actual se está observando un cambio en el patrón de comportamiento de las personas (nuevas formas y frecuencia de movilidad, nuevos espacios de trabajo derivados del confinamiento, etc.) y de las empresas; lo que lleva aparejado un cambio de los riesgos a los que se exponen, y de la siniestralidad. Y todo ello es muy importante  tenerlo en cuenta para que la lucha contra el fraude sea más efectiva.

Las causas de este significativo incremento de la tasa de fraude son, por un lado, el aumento de casos fraudulentos detectados, es decir, se detectan más casos como consecuencia de los mayores recursos y perfeccionamiento de la tecnología que permite identificarlos. Además, las dos crisis económicas que han azotado a España en la última década han podido tentar a un mayor número de ciudadanos a cometer un delito de fraude. La tasa de fraude ha pasado del 1,9% en 2019 al 2,2% en 2020. Por otro lado, la segunda razón  que explica el incremento de la tasa de fraude en España es la caída del número total de siniestros. 

Daños por agua

El informe de AXA destaca que los casos de fraude aduciendo daños por agua son los más numerosos, y representan casi el 44% de los casos. 

Los grandes fenómenos climatológicos (DANAs, borrasca Gloria, etc.) que afectaron a varias zonas  de España en 2020 pueden ser una de las razones que expliquen el significativo aumento de 10 puntos porcentuales en el número de casos que esgrimieron daños por agua para tratar de cometer un fraude, pasando de suponer el 18% del total en 2019 al 28% el año pasado.

Por su parte, los casos en lo que se adujeron daños eléctricos siguen la tendencia descendente que comenzaron hace unos años, hasta reducir su porcentaje al 17%, cuando en 2015 representaban casi el 28%. En cuanto a los importes, el ramo de Multirriesgos sufrió intentos de fraude por valor de más de 9 millones de euros. Y los daños por agua, como cabía esperar, fueron los más  significativos, con 3,6 millones de euros, seguido de fenómenos atmosféricos con 1,2 millones de euros.  

Finalmente, en el ramo de Diversos (RC, Industrias, Incendios, Decesos, etc.) los daños eléctricos  son los que más se aducen para tratar de acometer fraudes, con más del 20% de los casos; seguido  de los atmosféricos, con el 19%; y los daños por agua, con más del 12%; todos ellos muy vinculados  a los fenómenos meteorológicos.  

Atendiendo al análisis del fraude por su naturaleza; es decir; si afecta solo a daños materiales o si persigue obtener indemnizaciones fingiendo daños corporales , concluimos que los primeros son  los más numerosos, y representan el 82%. Por el contrario, los siniestros que fingen daños  corporales suponen el 18% restante.  

Esto no siempre ha sido así, hace solo cuatro años los daños corporales suponían más del 27% de los casos de fraude al seguro (frente al 18% actual). Además de un descenso en el número de casos total, estos cambios legislativos han hecho que el importe del fraude detectado aduciendo daños corporales en el ramo de Auto haya caído también  significativamente. En 2012, a través de los daños corporales sufridos en supuestos accidentes de tráfico se trataron de defraudar a AXA 27,7 millones de euros. El año pasado fueron 18,7 millones. 

Consecuencias del fraude

La detección de los casos de fraude tiene un impacto importante en la prima que pagan los asegurados por sus pólizas. El año pasado los pagos evitados por casos de fraude y que no fueron repercutidos en el resto de los asegurados supusieron un ahorro del 32% en el seguro o del  19% en los casos de Transportes y Embarcaciones. 

En los ramos con mayor penetración en el mercado, este ahorro para los clientes fue del 4% en Auto y del 6% en Hogar.

Artículo solo para registrados

Lee gratis el contenido completo

Regístrate

Ver comentarios