TRIBUNALES
Arranca en la Audiencia el juicio contra los acusados por el crimen del Churrero
La vista contra los tres ciudadanos de Europa del Este procesados por matar a golpes a Antonio Romero se celebra bajo fuertes medidas de seguridad
Más de 15 años después de que en Chiclana se produjera uno de los sucesos más crueles acontecidos en la provincia, este lunes ha comenzado bajo fuertes medidas de seguridad en la Audiencia Provincial de Cádiz el juicio por el conocido como 'crimen del churrero' . Antonio Romero de 78 años perdió la vida y su mujer Manuela resultó gravemente herida después de que unos ladrones entraran a su casa a robar y les golpearan brutalmente con una barra de hierro . A primera hora de esta mañana llegaban a la Audiencia desde prisión tres de los acusados, todos ciudadanos de Europa del Este. Hay otro encausado pero en la época de los hechos era menor de edad y no se encuentra en prisión.
Según recuerda el fiscal en su escrito de acusación, todo ocurrió la noche del 23 de septiembre de 2004. Sobre las cuatro de la mañana, el matrimonio se encontraba durmiendo cuando los procesados entraron encapuchados en la casa buscando dinero y joyas.
Uno de ellos, A.S. y el menor, se dirigieron a la habitación donde estaba Manuela y le amarraron las manos y le golpearon con una barra de hierro en la cabeza y el cuerpo. Mientras, F.M. y E.B. fueron a otro cuarto donde estaba Antonio. También le ataron y le empezaron a golpear igualmente con otra barra de hierro al tiempo que le preguntaban por dónde estaba la caja fuerte. Finalmente se llevaron 7.000 euros.
A las nueve de la mañana, Antonio fue hallado muerto . Su mujer, que se pudo desatar, estaba en estado de shock. Según los estudios forenses la agresión fue mortal. La Fiscalía solicita para cada uno de los procesados la pena de 30 años de prisión por los delitos de asesinato, robo con violencia en casa habitada y lesiones con instrumento peligroso, además de que indemnicen a los hijos de las víctimas con 151.000.
Los supuestos autores fueron detenidos en el marco de la operación Algoritmo, desarrollada por la Guardia Civil en 2016 y 2017, después de que uno de ellos volviera a actuar en Valencia. Las pruebas de ADN practicadas entonces permitieron hacer un cotejo con los indicios hallados en la casa de Chiclana y se le pudo identificar. La investigación dio también con sus supuestos compinches.