Cádiz
Alimoche, el vuelo del pequeño rapaz
La especie de buitre más amenazada de Europa, junto al quebrantahuesos, ocupa en la actualidad veinticinco territorios reproductores, 15 en Cádiz
El inicio de una tendencia ascendente de la población reproductora del alimoche en Andalucía ha quedado confirmado en 2019, según se refleja en el último censo del Plan de Recuperación de Aves Necrófagas.
Los resultados de este trabajo señalan la existencia de 25 territorios reproductores ocupados, 15 de ellos en la provincia de Cádiz , cinco en Jaén, dos en Córdoba y Málaga y uno en Sevilla, según ha informado la Junta en un comunicado.
El alimoche (Neophron percnopterus percnopterus), especie catalogada con la máxima figura de protección en el Catálogo Andaluz de Especies Amenazadas, es la más pequeña de las rapaces carroñeras europeas y una de las más oportunistas en cuanto a su ecología trófica, alimentándose de cualquier tipo de carroña. Este hecho la hace « tremendamente vulnerable » al veneno, la principal causa de mortalidad conocida en Andalucía. La segunda causa no natural son los accidentes por colisión con los aerogeneradores de parques eólicos. Otros problemas de conservación son los que afectan a la reproducción destacando las molestias producidas en los lugares de cría por actividades como construcción de infraestructuras, trabajos forestales o uso público no regulado. Minimizarlos provocaría un repunte en el número de territorios ocupados por parejas reproductoras y un efecto inmediato sobre la tendencia de la población reproductora.
Los técnicos de la Agencia de Medio Ambiente y Agua han realizado un censo completo de los territorios de cría y un seguimiento detallado de la reproducción que ha culminado con una campaña de anillamiento de pollos en los nidos de aquellas parejas reproductoras que han criado con éxito, y con el análisis de las causas de fracaso reproductor en aquellos territorios donde éste se ha producido.
La mayoría de los territorios de cría se encuentran en Espacios Naturales Protegidos, destacando los Parques Naturales Sierra de Grazalema, Los Alcornocales y Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas con seis, cinco y cuatro territorios ocupados, respectivamente. En 16 de ellos han llegado a volar 22 ejemplares jóvenes del año. El número de parejas reproductoras había venido disminuyendo sensiblemente desde 1990. En los tres últimos años se empieza a detectar un ligero repunte en esta especie, la más amenazada de Europa junto al quebrantahuesos.