SUCESOS

Agresión a dos guardias civiles en Puerto Serrano: «No les dio tiempo a reaccionar»

Ingresa en prisión el acusado de atacar brutalmente a un agente y lesionar también a su compañero en Puerto Serrano. «Estaba fuera de sí», dicen

Vista de la localidad de Puerto Serrano. LA VOZ

M. ALMAGRO

Una agresión ocurrida en Puerto Serrano este pasado fin de semana pudo terminar de la manera más trágica sino se hubiera zanjado en los modos y tiempos adecuados. Los hechos arrancan el sábado poco antes de las doce de la noche. J. A. A. B., de 32 años, irrumpe en casa de unos vecinos–al parecer no era la primera vez que lo hacía–. Lleva una loza afilada en la mano e intenta entrar en esa vivienda a la fuerza . Insiste en entrar y es entonces, según la información recabada, cuando golpea a la moradora, una señora de 86 años, que se encuentra convaleciente de una operación y la tira al suelo.

Lo ocurrido llega a oídos de la Guardia Civil que va por la mañana en busca del supuesto agresor. Acuden a su casa para desplazarlo al cuartel y tomarle declaración, pero todo se tuerce. Cuando les abre la puerta, sin mediar palabra les ataca también a ellos. «No les dio tiempo a reaccionar», explican las mismas fuentes. Con una fuerza «extrema» tira al primero de los agentes por las escaleras, cayendo éste veinte peldaños abajo. También empuja a su padre, un señor invidente y de edad avanzada. Sin embargo la actuación del segundo de los guardias civiles evita que se precipite.

La tensión era máxima. «Estaba fuera de sí» . En el suelo los dos agentes siguen recibiendo patadas y golpes mientras intentan reducirlo. Uno de ellos incluso tiene que ser atendido rápidamente por los servicios médicos ya que termina por caer inconsciente y sangra abundantemente por la cabeza. Aprovechando estos momentos de confusión, J. A. A. B., decide refugiarse de nuevo en su casa sin dejar de amenazar y gritar a los guardias civiles. Y también a sus familiares que insisten en que entre en razón sin conseguirlo. El guardia civil herido es trasladado al hospital de Villamartín. Tiene varias contusiones y le tienen que cortar el sangrado con catorce grapas de sutura en el cráneo.

Es entonces cuando se decide organizar un dispositivo de cerco del domicilio para evitar que el agresor se fugue y pueda herir a alguien. Además de los efectivos de Puerto Serrano acuden en apoyo agentes de Bornos, Algodonales y Zahara de la Sierra.

Cuatro horas y media de negociación

Es aquí cuando teniendo en cuenta las especiales condiciones psíquicas en las que se encuentra J. A. A. B. , los agentes deciden intentar mediar con él para que no se haga daño ni a sí mismo ni a nadie de su entorno. Cuatro horas y media de conversaciones cruzadas y muchas artes de psicología y negociación para que finalmente acudiera al cuartel y allí fuera detenido como presunto autor de los delitos de atentado grave a los agentes de la autoridad, lesiones y allanamiento de morada. Durante ese tiempo fue sometido a una discreta vigilancia para que no escapara o se pudiera poner en peligro. Una vez en el acuartelamiento pudo ser arrestado sin que fuera necesaria ejercer fuerza alguna sobre él.

Tras ser puesto a disposición del titular del Juzgado número 3 de Arcos, se dictaminó su ingreso en prisión. El detenido es vecino de Puerto Serrano y cuenta con un numeroso elenco de episodios de violencia ya sea contra sus vecinos o contra los agentes de la autoridad. Al parecer, ya fue detenido el pasado 1 de octubre como presunto autor de un delito de agresión sexual en grado de tentativa.

Artículo solo para registrados

Lee gratis el contenido completo

Regístrate

Ver comentarios