Incógnitas

La noticia de mayor impacto en las últimas 48 horas de la vida andaluza es el hallazgo del Rolls Royce ( el automóvil de lujo por excelencia) del difunto alcalde de Marbella, Jesús Gil y Gil, después de haber sido declarado desaparecido judicialmente durante años. El extraordinario hallazgo se hizo público ad hoc al dar a conocer la gestora del Ayuntamiento mártir de Marbella, en su página web, las condiciones para licitar en la subasta del espectacular vehículo, con un precio inicial de siete millones y medio de las inmoladas pesetas.

¿Cómo no creer, pues, en la celeridad y pulcritud de la justicia? Tras más de una década en el poder municipal de Marbella el añorado (por más de uno y de mil) Gil y Gil, gran diseñador del sistema de comisiones ilegales, entre otras corruptelas que alcanzan cifras millonarias mareantes, y de varios años de la muerte del fundador del GIL, se produce la primera subasta de una propiedad del fallecido prócer. Realmente enternecedor.

Porque hasta el momento, sólo había trascendido, en este capítulo de incautaciones de la justicia de obras de arte adquiridas merced a los beneficios del gran pufo, las intervenidas al conseguidor Roca, el ingeniero jefe del sistema de corrupción patentado por el paternalista y muy citado Jesús Gil.

Y es que la cuestión está en la mente de la mayoría. ¿Se está investigando los respectivos patrimonios de los concejales y allegados de las sucesivas corporaciones gilistas en los años oscuros del Ayuntamiento de Marbella? O, por el contrario, ¿toda la investigación y acción de la justicia se viene centrando exclusivamente en los concejales y conseguidores de los distintos equipos de gobierno desde Julián Muñoz hasta el asfixiante presente rabioso?

Y otra incógnita: ¿Logrará la comisión gestora sobrevivir hasta las vísperas del domingo 27 de Mayo del próximo año, para entregar el Ayuntamiento como Dios manda a la fuerza política ganadora en las urnas? Que se nos conceda, cuando menos, el beneficio de la duda.