Tres de cada cinco niños muertos en las carreteras no llevaban ningún tipo de sistema de seguridad
Un estudio revela que unos 5.700 menores de catorce años son víctimas de accidentes de tráfico cada año
Actualizado: GuardarNi capazos para bebés, ni arneses especiales, ni silla-cesta, ni cojín elevador. La imprudencia de muchos conductores que desprecian la seguridad de los niños en el interior del vehículo provoca cada año la muerte de unos 65 menores de 14 años en las carreteras españolas. Esta cifra supone que tres de cada cinco fallecidos de un total de 108 no llevaban sistema de prevención alguno, a pesar de las fuertes sanciones que impone la Ley de Seguridad Vial para este tipo de delitos, incluido el nuevo permiso, que resta tres puntos al conductor que carezca de estos medios de seguridad. Los datos han sido dados a conocer en el informe Los niños, víctimas de los accidentes de tráfico, elaborado por una compañía de seguros con la colaboración del Instituto de Tráfico y Seguridad Vial (Intras).
Se trata de las primeras cifras conocidas sobre el impacto de los accidentes circulatorios en los niños. Para ello se han analizado 500.000 siniestros ocurridos en España en el periodo 2000-2004 en los que se han visto implicados menores de 14 años, esto es, aquellos que por su edad no pueden conducir medio de locomoción alguno.
El estudio gira en torno a la idea de que los accidentes de tráfico son una de las primeras causas de mortalidad entre los más pequeños, no obstante representan el 5% del total de los siniestros con resultado de muerte.
Entre sus conclusiones, además de la citada carencia de sistemas de seguridad para niños, destaca que más de 5.700 menores son víctimas de la carretera cada año, lo que equivale a decir que todas las semanas mueren dos niños, 16 resultan heridos graves con traumatismos de consideración y más de 90 quedan heridos leves. El informe cuenta con las variables de los niños como pasajeros, peatón y usuario de bicicletas y revela que en la mayoría de los casos (un 60%), viajaban en un turismo por carreteras como acompañantes. El lugar que ocupa en el mismo no está relacionado con más o menos siniestralidad, asegura el informe, según datos de la Dirección General de Tráfico.
Las vacaciones estivales coinciden con los meses donde más niños están involucrados en accidentes de tráfico . Sólo en julio y agosto se registra la cuarta parte de las víctimas y uno de cada cinco fallecen en el último mes. La mayoría de los desplazamientos se producen por motivos de ocio, los fines de semana, con buen tiempo y a plena luz del día: mediodía y tarde, principalmente.
Conductores respetuosos
De la misma forma, el perfil del conductor que viaja con niños respeta las normas más que el resto, sobre todo los límites de velocidad, aunque más de la mitad comete una infracción y uno de cada cinco conduce de forma distraída o desatenta. Con respecto a los niños como peatones, más de 1.500 son atropellados cada año -un 12% del total de los atropellos-, casi todos se producen en las ciudades y la mayoría de las veces es el menor el que comete algún tipo de infracción, como cruzar sin mirar.
También las bicicletas son factores de riesgo, casi siempre en verano, cuando aumentan hasta por tres los accidentes. Cada año 250 niños son víctimas de un accidente de bicicleta, de los que cuatro mueren y unos 60 sufren lesiones de gravedad. Una de las claves es la ausencia del casco -sólo lo llevan el 5 por ciento de los mismos-, y la distracción.