El Cádiz retoma los entrenamientos con el 'chip' de Segunda

La era Oli comenzó ayer de manera oficial. El Cádiz 2006-2007 echó a rodar en la que será una larga pretemporada con un primer entrenamiento celebrado en el estadio Carranza. Un total de 25 jugadores saltaron, en torno las 10 de la mañana, al césped para preparar su vuelta a la Primera División ante el entusiasmo de más de 200 espectadores que no quisieron perderse ningún detalle de la vuelta al trabajo de su equipo.

La sesión se alargó durante casi dos horas. En primer lugar, el cuerpo técnico y los futbolistas se reunieron en el centro del campo para establecer una primera toma de contacto. Tras la charla, que duró diez minutos, Oli ordenó a toda la plantilla realizar carrera continua alrededor del campo, excepto a Raúl López que entrenó al margen del grupo para intentar recuperarse cuanto antes de la lesión que viene arrastrando en el tendón de aquiles de su pie izquierdo desde el final de la pasada temporada.

En este primer día, el trabajo puramente físico se limitó a la carrera inicial y a los estiramientos pertinentes, y todo eso bajo el mando del preparador físico Lorenzo Buenaventura, que en todo momento estuvo atento al desarrollo de sus pupilos, en especial de los canteranos.

Nada más terminar estos ejercicios, el balón pasó a ser el gran protagonista hasta el final de la sesión, ya que la intención del técnico oventense no es otra que dedicar la primera semana de entrenamientos a la recuperación de los jugadores en todos sus aspectos, dando preponderancia al toque y a la circulación de balón, intercalado siempre con el trabajo físico diario.

De esta manera, y con los jugadores contentos, por eso de tocar bola, los jugadores se dividieron en cinco grupos de cuatro y estuvieron realizando ejercicios con balón durante 15 minutos, una especie de rondo para fortalecer el control, el pase..., en definitiva, la técnica. A medida que pasaban los minutos, poco a poco, los jugadores iban entrando en calor y en el ritmo habitual, muy similar a cualquier entrenamiento del año. Caían las primeras gotas de sudor. Y es que ayer el calor era sofocante. Mientras tanto, los cuatro porteros integrantes de la plantilla, Armando, Limia, Navas y el canterano Dani, se ejercitaban con Ángel Férez, actual preparador de porteros.

Primer partidillo

Oli parece tener las ideas claras desde el principio en cuanto a la dinámica de trabajo. Primer día y, por lo tanto, primer partidillo, de unos veinte minutos. Así que el técnico confeccionó dos equipos de once para que la sana competencia entrará en escena. Por un lado, y con peto rojo se alinearon Armando, Abraham Paz, Vella, Acuña, De Gomar, Sesma, Lobos, Enrique, Medina, De Paula y Navas. Por otro, el equipo de peto azul lo conformaron Limia, De Quintana, Morán, Bezares, Ezequiel, Chico, Nano, Fleurquin, Dani, Miguel Ángel y el canterano Pablo. El resultado final fue de 3 a 2, con victoria para los que vestían con peto rojo, y con Pablo como máximo goleador del choque con dos tantos. Del partidillo se quedaron fuera el antes mencionado Raúl López junto a Pavoni, que no ha recibido todavía el alta médica para recibir choques y caídas por su problema del hombro, y el lateral derecho Velázquez, que sufre una carga en el abductor izquierdo. Como colofón a este primer entrenamiento, Buenaventura, de nuevo, mandó a los jugadores realizar carrera con el fin de que recuperasen el tono muscular.

Evidentemente, aún es pronto para sacar conclusiones, pero se pueden sacar las primeras impresiones al respecto después de lo visto en el día de ayer. La entrega y el esfuerzo serán dos de las claves del equipo para la próxima campaña. Su entrenador así lo hizo como futbolista, y así lo querrá para sus jugadores.