Adrien Brody y Penélope Cruz, durante el rodaje de una de las escenas en un coche / JAVIER RÍOS
Cultura

Las estrellas se encierran en coches clásicos y eluden el coso

Las dos semanas de rodaje previstas en El Puerto pueden quedar finalmente reducidas a la mitad

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«Que salude Pe, que salude Pe», era la consigna más popular que repetían ayer los portuenses en los aledaños del set de rodaje de la película Manolete, cuando pasaba algún coche de época con actores dentro. De hecho, todas las imágenes que se tomaron ayer fueron de cameracar, es decir, dentro de diversos automóviles. Apenas nada al aire libre. Aunque una gran expectación rodeaba la Plaza de Toros de El Puerto, posible escenario de la grabación de las escenas de la muerte del mítico diestro, no hubo grabación sobre el albero. Quedaron aplazadas a la se-mana próxima, siempre y cuando no se trasladen a Jerez. Chasco para los curiosos.

Pese a esa pequeña decepción, fueron miles los portuenses que se arremolinaron para poder ver a las dos grandes estrellas de este film: Adrien Brody y Penélope Cruz. No fueron los únicos actores en participar ayer. También se dejaron ver Santiago Se-gura, que hace el papel de chofer y mozo de espadas de Manolete, y Juan Echanove, que ejerce en la película como apoderado del torero.

El gran momento taurino del rodaje portuense, sin embargo, sigue en el aire. Fuentes de la productora admitieron ayer que el director prefiere ahora la Plaza de Toros de Jerez para rodar las escenas de lidia, en vez de la de El Puerto, que era el escenario previsto para la próxima semana. Sin embargo, problemas burocráticos impiden la mu-danza hasta el coso jerezano, por el momento.

Los productores aseguran que ni los corrales ni los toriles portuenses son los más adecuados para encerrar los diez toros bravos que se pretenden tener en cautividad durante siete días de rodaje. La plaza de Jerez, según las mismas fuentes, reúne mejores requisitos aunque la Junta, por ahora, no permite que se utilice el coso jerezano. Hasta el lunes no se saldrá de la duda: o El Puerto o Jerez.

Para los aficionados taurinos y para los cinéfilos, el posible cambio de escenario es una de-cepción, puesto que dejaría las dos semanas de grabación previstas en El Puerto reducidas a la mitad.