El Congreso aviva la 'guerra interna' entre los funcionarios de Hacienda
Actualizado: GuardarLa situación laboral de la Agencia Tributaria está otra vez en plena ebullición, dentro de su conflictiva historia. Ahora ha sido el Parlamento el que ha avivado la 'guerra interna' que mantienen desde hace años los inspectores de Hacienda y el resto de colectivos profesionales de la organización. Si hace meses el motivo de queja era la retribución de los primeros (cuyo modelo de productividad ha sido anulado por los tribunales), ahora se trata del posible ascenso por la vía rápida de buena parte de los segundos, en concreto de los más de 8.000 profesionales de la subinspección.
Los grupos parlamentarios de la oposición -sobre todo, PP, CiU e IU- han presentado, entre sus enmiendas al proyecto de Ley de Prevención del Fraude Fiscal, sendas solicitudes para crear un nuevo cuerpo superior y, por tanto, directivo, en el que los subinspectores vendrían a integrarse 'de facto' entre los inspectores de Hacienda. El argumento de los políticos es que así se dispondrá de más medios humanos, destinados a combatir el fraude y el blanqueo de capitales, así como a controlar las subvenciones y el gasto público.
Para los subinspectores, por el contrario, la reacción del hasta ahora único cuerpo superior del fisco es «desmedida», y responde sólo a sus intereses particulares de «mantener en exclusiva su privilegiado estatus». La postura oficial del Gobierno ante este conflicto, es el silencio. Además, tienen razones tanto a favor como en contra de la medida. En el primer caso, disponer de más medios para prevenir el fraude fiscal; en el segundo, tener que incrementar de forma notable el presupuesto de la Agencia Tributaria, algo que no entra en sus planes a corto y medio plazo.