Los 'nacionalizados', con olfato de gol

El juego de las nacionalizaciones depara anécdotas curiosas en todos los Mundiales. Ayer se produjo una más y tuvo a 'Zinha', el revulsivo de los mexicanos, como principal protagonista. No sólo porque su entrada en el terreno de juego sirvió para que el combinado de La Volpe destrozase el sueño iraní, sino porque este brasileño se convierte en el segundo futbolista de la cita alemana que marca para un país que defiende como nacionalizado. El primero fue el teutón de origen polaco Miroslav Klose, autor de dos de los cuatro goles que Alemania le hizo a Costa Rica en el encuentro inaugural. En Corea, hasta ocho futbolistas gozaron de marcar para su país después de haberse nacionalizado. Los 'nacionalizados' tienen olfato de gol,

En el conjunto asiático, el autor del gol también pasará a la historia. Con su tanto ante México, Golmohammadi se convierte en el noveno futbolista más veterano que 'moja' en la mayor fiesta del balompié. El defensa del Saba Battery, que marcó ayer con 35 años y 84 días, aún podría superar al mexicano Ricardo Peláez si consigue anotar una diana más allá de los octavos de final. Si lo logra, algo que parece un tanto complicado pues con la derrota de ayer Irán tiene muy complicado pasar de fase, se iría de Alemania como séptimo clasificado en la clasificación de artilleros más veteranos. Ali Daei, en cambio, la estrella del combinado asiático, es ya el iraní más viejo que ha jugado un choque del Mundial. Con 37 años y 82 días, desbancó a Nader Mohammadkhani, que se enfrentó a Alemania en 1998, con 34 años y 306 días.