Compañeros dentro y fuera de la pista
El matrimonio formado por Hermenegildo Sabido y María del Carmen Riquelme se impuso en una prueba de ultrafondo celebrada en tierras suizas
Actualizado: GuardarSuiza no tuvo más remedio que rendirse ante la evidencia. Hermenegildo Sabido y María del Carmen Riquelme -su esposa y compañera de entrenamientos- dejaron buena muestra de su potencial conquistando la primera plaza en la categoría de veteranos en una competición de ultrafondo de carácter internacional celebrada en Basilea hace unos días, en la que los dos atletas jerezanos realizaron un excelente papel.
El reloj marcaba las doce de la mañana y el termómetro alcanzaba los 28 grados. Por delante, veinticuatro horas de sacrificio -en categoría masculina- y un total de 110 corredores dispuestos a darlo todo para coronarse como los mejores ultrafondistas del continente. Hermenegildo era consciente de la dificultad que entrañaba su reto ya que, a pesar de que ostenta el subcampeonato de España en los 100 kilómetros, no es su especialidad la de correr los 200 kilómetros -204, 755 para ser más exactos-. No obstante, su capacidad para superarse y la ilusión por alcanzar el objetivo sin parar un sólo instante pesaron más que la adversidad, y el jerezano, que tuvo que capear las embestidas de suizos, alemanes, italianos y franceses -de un excelente nivel-, logró finalmente su cometido. «En España hay pocas carreras como esta, y yo estaba especialmente ilusionado con hacer la de Suiza. No esperaba quedar primero, pero la cosa salió mejor de lo que esperaba y estoy muy contento con el resultado».
Diez horas habían pasado en el momento en el que Hermenegildo alcanzaba la mitad de su recorrido. Desde que se diera el pistoletazo de salida, no dio opción alguna a sus rivales y se colocó entre los diez primeros de la clasificación general. Llegado a las 20 horas, el jerezano parecía no acusar el cansancio y las bajas temperaturas nocturnas y comenzó a remontar posiciones.
Los últimos veinte minutos fueron de lo más emocionante, ya que la remontada se hizo factible y finalizó la prueba en sexta posición, aunque el primero de su categoría. «Estás dando vueltas y no sabes exactamente cómo estás, hasta que ya ves la tablilla. Cuando me vi el sexto no me lo creía», relata un deportista que recibirá en estos días un reconocimiento por parte de la Diputación, junto a el resto de campeones de la provincia.
Superada la línea de meta, todo eran felicitaciones, por parte tanto del resto de participantes que iban llegando como del público asistente, conocedores del enorme esfuerzo realizado por este atleta que, a pesar de su edad, no para de cosechar éxitos en el mundo del atletismo.
Riquelme también triunfa
El éxito gaditano en tierras helvéticas fue por partida doble. Al ya consabido triunfo de Hermenegildo Sabido se unió el de María del Carmen Riquelme, que se sumó a la fiesta emulando la gesta de su compañero de viaje.
Tras completar doce horas corriendo y llegar a alcanzar los 89,426 kilómetros, la atleta jerezana entró tercera en la línea de meta, primera en la categoría de veteranos.
Una de las claves para que este éxito se produjera fue el hecho de que ambos ultrafondistas permanecieron juntos durante el tiempo que duró la prueba femenina, corriendo al mismo ritmo, algo que influyó de manera decisiva en el resultado, ya que ambos deportistas habían realizado juntos los entrenamientos y la preparación, tanto física como psíquica, en un largo pero fructífero período de seis meses. «Las primeras doce horas las hice yo sólo. Luego ella se incorporó a hacer sus doce y estuvimos juntos todo el tiempo. Siempre que me es posible me gusta ayudar a la gente a que consiga sus marcas», señala este deportista jerezano, excelente esposo tanto dentro como fuera de la competición.
Gran papel en Ronda
No había pasado ni una semana desde que volvieron de Basilea cuando ya estaban inmersos en otra competición de largo recorrido.
Según comenta Hermenegildo «es una de las pruebas a las que nunca faltamos y nos decidimos a ir, ya que nos gusta porque se celebra en Andalucía». Apenas recuperados del desgaste, ambos se calzaron sus zapatillas para realizar los 101 kilómetros de recorrido -más duro que en otras ediciones-, marca que cubrieron en unas 15 horas. «Ella se recuperó mejor y estuvo más fuerte, de hecho quedó la primera de su categoría. Pero nuestra intención era la de terminarla».
Sus ganas de seguir tumban a cualquier adversidad. Compañeros fuera y dentro de la competición, tienen muy presente que «mientras no quedemos los últimos seguiremos corriendo hasta que el cuerpo aguante». Ahora llegan varias citas importantes que van a afrontar con la intención de volver a superarse.
En junio cubrirán el trayecto entre Córdoba y Cerro Muriano, y después pretenden realizar una subida de 50 kilómetros al Veleta, aunque ella aún no lo tiene decidido. Ya en el mes de septiembre, concretamente el día 30 en Santander, Hermenegildo intentará revalidar su subcampeonato de España. Por ganas, desde luego, no quedará.