Distribución, al fin, legal

El mundo de las redes P2P siempre se ha encontrado rodeado de polémica. Una filosofía que se centra en contadas aplicaciones de intercambio en las cuales los cibernautas encuentran numerosos archivos que son compartidos por otros usuarios, de los cuales los descargan a su disco duro. Un servicio que no resulta del agrado de las grandes compañías audiovisuales que ven en los mismos una seria amenaza para la industria. Claro que este tipo de tecnología no siempre se utiliza sin el beneplácito de las multinacionales.

Es el caso del nuevo servicio presentado por Terra, compañía filial de internet de Telefónica, que bajo el término Pixbox ha creado una plataforma para el intercambio y la venta de contenidos audiovisuales por internet, basado en un sistema legal de intercambio entre usuarios por medio de redes peer to peer. El proyecto cuenta con el apoyo de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) y los productores de música y cine (Promusicae y Egeda) y ya dispone de un catálogo de 1,2 millones de canciones a partir de 0,75 euros cada una. Una interesante iniciativa con la que conseguir un amplio surtido de música, que se basa en el sistema de seguridad DRM (Digital Rights Management) de Microsoft, el cual exige compatibilidad con Windows Media para descargarse a un reproductor, y las plataformas para el hogar de Intel, que aseguran que el contenido del original no pueda ser modificado y permita la difusión de virus.

Un servicio que asegura los de-rechos de autor de todas las obras incluidas en PixBox.

Tiendas virtuales

El proyecto, según las previsiones de la compañía, podría llegar a alcanzar los dos millones de descargas durante el presente año, y no sólo se centra en el contenido que ofrece el servidor de Telefónica, sino que también permite las descargas desde la tienda virtual de otro usuario. Cuando un usuario descarga un contenido de la tienda de otro, el segundo es premiado con puntos canjeables por más consumo, pudiendo dar lugar de esta manera a la constitución de pequeñas comunidades con gustos similares y sus propios lideres de opinión. En cualquier caso, será preciso esperar unos meses para observar si el público está realmente interesado en PixBox.