«Mis compañeros me tratan como a uno más»

Antes de llegar a Equa nunca había subido solo a un autobús. Ahora lo hace a diario para ir desde San Fernando a su trabajo en la Delegación de Bienestar Social, donde está contratado desde hace dos años tras superar un periodo de tres como ordenanza en prácticas.

Con 24 años y una discapacidad intelectual del 34%, Nacho considera que su labor de clasificar y distribuir la correspondencia es «fácil» y manifiesta que se siente a gusto en el puesto. Cada día va a desayunar con sus compañeros de departamento y nunca se ha sentido objeto de discriminación: «Mis compañeros me han tratado como debe ser, como una persona más, con algunas limitaciones, pero persona».

Como él, Bea logró acceder al mundo laboral tras pasar por el servicio puente de Equa, un curso que la ayudó a madurar y a ganar confianza en sí misma. Su formación como auxiliar administrativo le permitió realizar prácticas en la Federación de Consumidores en Acción (Facua) y conseguir un contrato de cinco meses en el Ayuntamiento de Cádiz.

En estos momentos trabaja como ordenanza en la Delegación de Turismo, Comercio y Deporte. Y resalta que el empleo le ha servido para ganar cierta independencia y costearse sus gastos, aunque, a sus 25 años, su mayor ilusión es marcharse de casa de sus padres para vivir en un piso compartido con otros jóvenes.