El jurado del 'caso Sanlúcar' no alcanza el veredicto y permanece aislado en un hotel
Los nueve ciudadanos tendrán que seguir deliberando hoy para llegar a un acuerdo en relación al presunto soborno del ex alcalde socialista de la localidad
Actualizado: GuardarLa jornada de ayer en el caso Sanlúcar, en donde estaba previsto que el jurado alcanzara un veredicto en relación al presunto soborno del ex alcalde socialista de la localidad a un edil del PP en 1999, resultó larga y dio para mucho. Los siete procesados, por ejemplo, se cansaron de leer los periódicos, de tomar cafés, fumar cigarrillos, y charlar en los pasillos de la Audiencia Provincial. Alguno incluso no perdió las buenas costumbres y se echó una pequeña siesta.
Las numerosas rectificaciones que sufrió el informe del caso Sanlúcar a petición de los magistrados supuso un retraso considerable. El objeto del veredicto, integrado por 87 preguntas, fue entregado al jurado a las seis de la tarde. Hora en que los dos suplentes hacían acto de aparición para abandonar la Audiencia por orden del titular de la sala, según recoge la ley.
Entonces, comenzaron las cábalas entre los presentes (letrados, imputados y periodistas) para ver si el jurado tendría el veredicto al ponerse el sol. Los abogados más veteranos ya anticiparon que era «imposible».
Se alarga la convivencia
La complejidad y la extensión del informe -«tiene 15 folios y la redacción no es muy buena», según confió a LA VOZ algún abogado- hicieron que los nueve ciudadanos no tuviesen tiempo suficiente para alcanzar un veredicto al término del día. Con lo cual, el presidente del tribunal, Rafael del Río, no tuvo más remedio que aislar al jurado en el hotel Puertatierra para que pernoctase. El jurado permaneció sin teléfono ni televisión. Así, a las nueve y treinta de la tarde un furgón de la Policía Nacional trasladó a los nueve ciudadanos desde la Audiencia al mencionado hotel.
En la jornada de hoy se presume más tensión entre los nueve miembros del jurado que tendrán que deliberar con rápidez a medida que les apremie el tiempo. De no alcanzar el veredicto, la situación podría complicarse, ya que existe una ley que estima que pasadas las 48 horas de convivencia el jurado se tiene que disolver.
