Un paseo en Semana Santa

Así podría comenzar mi artículo, sobre nuestra Semana Santa, en el cual deseo expresar todo lo que ha acontecido en estos días. En primer lugar, querría agradecer sobre todo a San Pedro, que nos ha respetado durante estos días con un tiempo hermoso y primaveral, en los cuáles hay que resaltar como han lucido nuestros maravillosos pasos tanto de misterios como dolorosas bajo palio, no sólo en Cádiz sino en el resto de la provincia. También quisiera dar la enhorabuena a Onda Cádiz y en especial a su presentador Guillermo Riol, al cuál admiro mucho como cofrade y a esas maravillosas imágenes que nos han ofrecido desde Catedral y por distintas calles y plazas de esta ciudad, tanto en su recorrido como en recogidas. ¿Chapeau, genial, muy bien! Venga de donde venga esa cadena local, ahora mismo no quiero entrar en temas políticos, y además como dice el refrán : Ojos que no ven corazón que no siente.

Me quedo con lo positivo de las retrasmisiones y sus comentarios. También quisiera dar la enhorabuena a las cofradías, a su respetuoso orden en la calle, y a sus hermanos nazarenos y cargadores, que han demostrado una vez más tener un sello propio en llevar nuestros pasos. Las bandas de música han sacado sobresaliente, tanto las de dore como las agrupaciones musicales y bandas de música. En definitiva buenos horarios y buen discurrir de nuestras hermandades en sus cumplimientos. Por otro lado la prensa, como a la que escribo, ha estado muy bien con sus comentarios, fotografías y horarios que nos hacen estar detalladamente informados. Pero como de costumbre no todo ha sido genial. A mi modesto entender hay cosas que deberían suprimirse y que no son nada buenas para nuestra querida Semana Santa. No me ha gustado que en Cádiz, por ejemplo, seguimos teniendo un buen sector de público que sobra, que no respeta a las cofradías ni tampoco a los que estamos alrededor : comen, chillan empujan y dicen auténticas barbaridades (típico de Cádiz). ¿Señores mejor estáis en casa o en la playa ! No molestéis a los que nos gustan estas tradiciones. Ésto lo vengo observando todos los años, lo que no deja de ser negativo para el turismo y en consecuencia para la ciudad y su progreso, si lo hubiere. Otro punto negativo que me gustaría tratar es el de la moda que está viniendo, cada vez más, de salir de chaqué en las procesiones, No me parece nada correcto. Señores concejales, delegados, empresarios, médicos, militares, decanos y demás, si queréis hacer penitencia, salid como Dios manda con capirote y en el más profundo anonimato.