El Industrial remontó. / T. S.
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El Industrial remonta un partido que se le puso cuesta arriba desde el principio

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Apelando a la épica, al coraje y con más corazón que cabeza, el Jerez Industrial consiguió ayer una victoria importantísima ante la Unión Deportiva los Barrios al imponerse por tres goles a dos. No sólo se suman tres puntos vitales, sino que con esta victoria el equipo industrialista puede coger algo de oxígeno y moral para afrontar las finales que le quedan hasta final de temporada.Un encuentro el disputado en el estadio de la Juventud que comenzó con buenos síntomas, ya que en el primer minuto Vázquez disparó a puerta, en el primer acercamiento del partido, y un defensa metió la punta de la bota para mandar a lo justo el balón al palo. Las cosas parecía que iban a pintar bien, pero nada más lejos de la realidad. Como ya nos tiene acostumbrado los industrialistas llegó el jarro de agua fría y en el minuto cuatro de partido, los barreños, en la primera ocasión clara de gol, mandaban el balón al fondo de la portería. Marcos adelantaba al equipo visitante, tras recoger un rechazo justo debajo de la línea divisoria de gol.Los industrialistas, que salieron bien plantados al césped jerezano, no se arrugaron ante el agua fría que les cayó encima y siguieron creando ocasiones, que finalmente no llegaban a buen fin.A los 17 minutos, llegó lo que parecía que iba a ser la sentencia definitiva para los hombres de Fontana. Nono disparó, en la segunda ocasión de los barreños, y el balón que le dio a Piñero en la pierna, ponía el cero a dos en el marcador. Cuando menos ocasiones estaba creando el Industrial, al filo del descanso, llegó el soplo de aire fresco para el conjunto albiazul. Expósito de cabeza en el 46 marcaba un gol antes de marcharse al descanso.En la segunda mitad, los industrialistas se creyeron que iban a ganar el partido, fueron a por él y lo consiguieron. Con casta y coraje, primero Fajardo en el 63 y después pana, ocho minutos más tarde, daban tres puntos vitales para que el corazón del industrial siga latiendo.