Reacciones 26-J
Y en la Caleta ganó el Cádiz
Unidos Podemos vive con decepción unos resultados que fueron de más a menos en un ambiente que sólo salvó en sonrisas el ascenso del equipo amarillo
Noche de contrastes en el cuartel general que Unidos Podemos había instalado en el gaditano barrio de la Viña. La jornada comenzaba en la Peña Flamenca Juanito Villar en plena Caleta, donde se había reunido la coalición de izquierdas. Militantes y candidatos llegaban a la caída de la tarde con sonrisa amplia, disfrutando de mensajes de optimismo y abrazos por lo que ‘podía ser’. Comentaban los buenos augurios que apuntaban las encuestas que se daban a conocer pero el partido no había acabado. Según avanzaban las horas se iba enmudeciendo el ambiente, los gestos ya se medían más, y afiliados y simpatizantes se concentraban con nervios al cobijo de tabletas y portátiles que arrojaban los datos en directo. Las esperanzas de un buen resultado se iban diluyendo.
Ya lo avisaban los secretarios de organización de ambos partidos a su llegada. Hablaban de prudencia aunque sí se les escapaba alguna sonrisa. Entonces, nada les hacía presagiar que el revés iba a ser tan duro. 1.200.000 votos menos a nivel nacional , teniendo que contemplar en Andalucía el 'sorpasso' del PP al PSOE como terceros de la lista y en Cádiz capital, obligados a asumir la pérdida del primer puesto en votos en favor de un PP que conseguía unos 2.600 apoyos más con respecto a los comicios de diciembre.
La noche no pintaba del todo bien. Del todo porque las luces y sombras también se vivían con motivo de otro escenario, el futbolístico. Y es que en la Caleta no sólo se vivía pendiente del escrutinio electoral sino que además eran evidentes los nervios por el partido de ascenso que el equipo cadista estaba jugando en Alicante contra el Hércules. Y en ese terreno de juego la cosa fue mejor. Lo escenificó perfectamente el alcalde de Cádiz José María González a su llegada poco antes de las once de la noche. Enfundado en su camiseta amarilla saludaba a los compañeros de partido con el entusiasmo de la victoria que el fútbol, en esta ocasión, sí le había concedido.
Maíllo: «La ofensiva del miedo ha tenido resultado»
Poco a poco el resultado se iba conociendo y tras el discurso de Pablo Iglesias llegaban los mensajes de los responsables andaluces de la coalición. Al grito de «la lucha sigue, cueste lo que cueste» de los presentes, el primero en hablar, el coordinador regional de Izquierda Unida, Antonio Maíllo , admitía: «No hemos obtenido los resultados que esperamos. Es evidente. La ofensiva y el mensaje del miedo sí ha tenido resultado», según Maíllo entre estos mensajes, el de la presidenta de la Junta a quien achacó que haya «permitido que el PP gane en Andalucía».
A pesar de esto, el izquierdista llamaba a la calma. «No hay que perder la expectativa de lo conseguido y lo que nos queda por conseguir. Seguiremos con una voluntad firme de construir una alternativa necesaria para Andalucía», afirmaba. «Mañana, pasado mañana, el otro… el bloque conservador va a intentar desmantelar los servicios públicos. Tendremos que vincularnos a una negociación más que necesaria para que este país no siga deshaciendo».
Y una llamada a la esperanza. «A partir de mañana seguiremos porque no vamos a permitir que este país se desguace. Nos mantenemos y estamos más fuertes que antes para mantener un debate».
Teresa Rodríguez: «No nos vamos a resignar»
Tomaba entonces la palabra la secretaria regional de Podemos, Teresa Rodríguez . «Somos el partido político que mejores resultados hemos sacado sin apoyo de la banca, del IBEX 35…», afirmaba. La responsable andaluza de la formación morada invitaba a la «reflexión» a Susana Díaz y al PSOE «que ha entendido que estas elecciones eran una campaña contra Unidos Podemos porque ellos temían perder el poder. Y se felicitaba por la incorporación como diputado andaluz del «jornalero» Diego Cañamero.
«Que reflexionen y piensen en aceptar las medidas que ponemos sobre la mesa. No nos vamos a resignar que el PP sea la fuerza más votada de Andalucía» manifestaba. «Trabajaremos más fuerte que nunca porque nuestra lucha y nuestro s valores lo valen. Ahora más que nunca. Porque lo hicimos cuando éramos cuatro, luego cuando éramos más en la Universidad y decenas de miles en el 15M. Ahora lo vamos a seguir haciendo como confluencia». Y añadía: «Mañana continuaremos con la movilización, seguiremos para ganar este país. Quizá no con el ritmo que hubiéramos deseado pero pensando que siempre que se abren las urnas la izquierda tiene más apoyo. Si no lo hiciéramos, no seríamos felices».