Municipalización Cádiz
Los servicios públicos de Cádiz hacen aguas
Kichi llegó a la Alcaldía gaditana en 2015 con una promesa bajo el brazo: la municipalización de los principales servicios municipales. Siete años después solo ha conseguido rescatar los de playas
La municipalización de servicios públicos se encuentra empantada ante la decepción de cientos de trabajadores que confiaron en el compromiso de Kichi
La municipalización de los servicios públicos de Cádiz fue una de las principales banderas electorales de José María González Santos ‘Kichi’ durante la campaña electoral de 2015 como candidato de Por Cádiz sí se puede, promesa que creó grandes expectativas entre los ... trabajadores de las principales contratas del Ayuntamiento de Cádiz.
Todos recuerdan esa imagen de Kichi, en los meses previos a acceder a la Alcaldía de la capital, conversando con personal del servicio de limpieza y recogida de basuras mientras realizaban su trabajo por la noche en las calles gaditanas.
Entonces se comprometió con ellos a rescatar este servicio para que dejara de estar en manos privadas pero, siete años después, la situación no es que esté igual, es que ha empeorado con creces. La ciudad está más sucia, la maquinaria está obsoleta y la posibilidad de municipalizar este servicio esencial se ha esfumado por completo.
Tras seis prórrogas de un contrato de limpieza que expiraba en 2016, el equipo de Gobierno aún no ha conseguido adjudicar este servicio esencial para los ciudadanos. En un principio se adjudicó a Cointer pero, finalmente, la mesa de contratación decidió rechazar esta oferta al considerar que era inviable económica y técnicamente, recayendo en la segunda empresa que optaba a este contrato: Acciona.
La licitación del contrato de limpieza, que junto al de transporte es uno de los más cuantiosos de la ciudad, se ha convertido en un auténtico serial con capítulos llenos de polémica. Además de acumular años de retraso, en estos momentos está a expensas del pronunciamiento del Tribunal de Contratación Pública dependiente de la Diputación provincial de Cádiz, que tiene que dirimir sobre los recursos presentados por Cointer y Valoriza una vez que el pleno decidió la adjudicación a Acciona.
Paralelamente a toda este trámite, una parte de los trabajadores se concentra cada semana a las puertas del Ayuntamiento de Cádiz exigiendo mejoras salariales y ya hay una clara amenaza de huelga de basuras coincidiendo con la celebración del Carnaval no oficial que comienza el próximo fin de semana.
Concretamente, la Federación de Servicios Públicos de UGT ha presentado esta convocatoria de huelga para los días 27 y 28 de febrero, 1, 2 y 3 de marzo.
Junto con el servicio de limpieza y recogida de basuras, Kichi y su equipo se comprometieron con los trabajadores encargados del mantenimiento y limpieza de Parques y Jardines de la ciudad a rescatar este servicio para que pasara a manos municipales, hecho que tampoco se ha producido.
Es más, se ha vuelto a externalizar y ahora, en lugar de Acciona (que no se presentó al nuevo contrato), es el grupo Raga el adjudicatario de este servicio. En un pleno extraordinario celebrado el pasado mes de enero se aprobó definitivamente esta adjudicación, contando con el voto afirmativo del equipo de Gobierno y con la abstención de la oposición, que recordó al alcalde gaditano que había perdido una oportunidad de oro para cumplir su promesa electoral de municipalizar este servicio.
Los trabajadores de Parques y Jardines denuncian que en el año 2018, cuando entró la anterior empresa adjudicataria (Acciona), el equipo de Gobierno terminó de «privatizar» el servicio . La empresa asumió entonces el mantenimiento y conservación del parque Genovés, labores que anteriormente eran prestadas por seis trabajadores municipales. Éstos fueron «recolocados» en otras dependencias municipales, contratando la empresa concesionaria a siete personas que desde esa fecha ya se hacen cargo de mantener esta zona verde de la ciudad.
Servicio de transporte obsoleto
Otro de los servicios públicos esenciales que está externalizado y que clama a gritos una mejora y renovación es el de transporte. Aunque el equipo de Gobierno lleva anunciando que la licitación del nuevo pliego es inminente, lo cierto es que Cádiz cuenta con una flota de autobuses obsoleta, con una antigüedad en algunos de los vehículos de más de veinte años, contaminante y con una frecuencia de paso en las paradas que desespera cada día a los usuarios.
Recordar que la última prórroga venció en el año 2015, año en el que Kichi llegó al Ayuntamiento gaditano. Esta prórroga, al igual que sucede con la de la limpieza, se sigue manteniendo año a año ofreciendo un servicio deficiente y criticado por toda la ciudadanía. Además, supone un gasto añadido para los gaditanos, que tienen que pagar de su bolsillo un déficit de explotación a la empresa concesionaria del servicio de más de dos millones de euros anuales. Y así van para seis años.
Incluso Kichi y su concejal de Movilidad, Martín Vila, presentaron a bombo y platillo un autobús híbrido que circuló en pruebas por las calles de la ciudad y del que nunca más se supo. Ytodo ello, bajo la firme promesa de que Cádiz contaría más pronto que tarde con un nuevo y moderno servicio de transporte. A poco más de un año de las Elecciones Municipales, todo sigue igual aunque la flota va sumando años y contaminando el aire en la ciudad.
Representantes de los trabajadores de contratas creen que se reduciría la precariedad laboral
Por otro lado, recordar que otros servicios públicos pasaron incluso por pleno siendo aprobado su rescate por parte del Consistorio gaditano. Es el caso del servicio de información turística , que a pesar de la promesa del Gobierno local de que sería municipalizado y de existir un acuerdo plenario, se optó por sacar a licitación un nuevo pliego a principios del pasado año 2021. A día de hoy aún no ha sido adjudicado.
Esta situación afecta a siete trabajadoras de las oficinas turísticas de la ciudad, que han sufrido años de polémicas y juicios contra el Ayuntamiento por su inestable situación laboral, reconocida en 2018 por la Inspección Provincial de Trabajo como «irregular y constitutiva de cesión ilegal de mano de obra» .
El servicio de ayuda a domicilio , que ha sido municipalizado en otras localidades vecinas como Chiclana, Puerto Real o Conil, también está a la espera de poder ser municipalizado y su plantilla lucha desde hace tiempo por mejorar sus condiciones laborales.
Otros colectivos que han mostrado su decepción por la promesa incumplida del alcalde de municipalizar el servicio público que prestan son, por ejemplo, los trabajadores del mantenimiento de las fuentes ornamentales, del alcantarillado, de la limpieza de dependencias municipales, de centros educativos, o de las instalaciones deportivas de la capital, entre otros.
Precariedad laboral
Desde el sindicato de reciente creación Servicios de Contratas, Concertadas y Servicios públicos (SSP) , su secretario, José Luis Moreda, confirma que «la gente está muy decepcionada» asegurando que el equipo de Gobierno liderado por Kichi ha optado por no cumplir con su promesa de municipalizar servicios «por desidia, desinterés y dejadez porque es perfectamente factible».
Es más, desde esta central sindical están elaborando actualmente un informe jurídico «donde queremos demostrarle al Ayuntamiento que se puede hacer y que es viable sin necesidad de que sea más costoso para las arcas municipales».
«El equipo de Gobierno no municipaliza los servicios por desidia y dejadez. Es factible»
Asegura que «el hecho de que vengan empresas con contratos de apenas dos años de duración (más otros dos años de prórroga en la mayoría de los casos) lo único que trae es precariedad laboral para las plantillas ».
Moreda lamenta que «en la mayoría de las ocasiones, estas empresas vienen a ganar el máximo dinero posible aunque los derechos de los trabajadores se vean perjudicados. En este sentido, añade que «al final tenemos que recurrir a la justicia para reclamar que se respete el pliego de condiciones y el convenio porque no hay un seguimiento ni control de los mismos».
El secretario de SSP insiste en que «llevamos batallando mucho tiempo por despidos, recortes de pluses...hemos tenido que denunciar muchas veces a las empresas adjudicatarias incluso por céntimos pero, insistimos, hay que respetar los convenios a rajatabla, al igual que vigilar el cumplimiento de los pliegos de condiciones».