TRIBUNALES
Rodríguez de Castro llega a España
El exdelegado de la Zona Franca ha llegado a Barajas procedente de México a las seis y media de la mañana para cumplir su condena por el 'caso Rilco'
El exdelegado de la Zona Franca de Cádiz, Manuel Rodríguez de Castro , ha llegado esta mañana a las seis y media al aeropuerto de Barajas (Madrid) para cumplir la condena de ocho años de cárcel por el 'caso Rilco'.
Rodríguez de Castro se encontraba desde la pasada primavera recluido en un centro de México, el país en el que fue detenido tras permanecer más de un año en busca y captura .
Tras llegar como reo a la terminal de vuelos internacionales del aeropuerto, los agentes que lo han custodiado lo han puesto a disposición de los juzgados centrales de instrucción de Madrid donde será 'legalizado', es decir, pasará de detenido a penado. Así, el juez de guardia decidirá su ingreso en una prisión madrileña . El posterior traslado a una cárcel gaditana o de Sevilla, de donde es natural, tendrá que ser solicitado ya por el procesado basándose en criterios de «arraigo» y, posteriormente, valorado por el juez de vigilancia penitenciaria que le corresponda.
Tras su extradición, el nombre de Manuel Rodríguez de Castro deja de estar en la lista de asuntos judiciales pendientes de los tribunales gaditanos. El exdelegado de Zona Franca entre 1996 y 2001 fue detenido el pasado 21 de abril en México por agentes adscritos a Interpol, tras una petición cursada por la Unidad de Fugitivos del Cuerpo Nacional de Policía. Había permanecido doce meses fugado.
Hasta ayer, Rodríguez de Castro, ha permanecido en el centro federal de readaptación social del país azteca, a la espera de que se formalizara su extradición por la sentencia que le condenó el 22 de julio de 2013 y que posteriormente ratificó el Supremo.
Según confirmaron tras su arresto fuentes oficiales, el exdelegado de la Zona Franca de Cádiz estaba «totalmente integrado» en la sociedad mexicana . En 2014 había incluso obtenido la nacionalidad del país y estaba en plena expansión de una nueva empresa que había montado dedicada al servicio de banda ancha y despliegue de redes en el Norte, Centroamérica y el Caribe llamada Cromsat. Pero con una salvedad. Cambiaba a menudo de residencia y de teléfono, había dejado las redes sociales y su famoso blog y se hacía llamar Manuel Rodríguez.
Entre lujos
Pero a pesar de tomar entre otras estas precauciones para evitar ser localizado, fue finalmente arrestado en su domicilio, ubicado en la zona de Pedregal de San Ángel de Ciudad de México, un lugar residencial donde se ubican algunas de las mansiones más lujosas del país.
Desde que en 2005 Rodríguez de Castro fue denunciado y comenzó a ser investigado, no se acordó ninguna medida privativa de libertad ni tan siquiera de restricción de movimientos. Tras la confirmación de la pena por parte del Supremo, el exdelegado de la Zona Franca sí tuvo tiempo de enviar un comunicado a los medios, asegurando que estaba en España, que la orden de busca y captura le producía «indefensión» y que tenía recurrida la sentencia. Además aseguró que sufría «una persecución política como la de Rodrigo Rato».
El caso que lo lleva a una celda
Tras ese escrito, desapareció. Ahora irá a la cárcel por el 'caso Rilco', el fraude que cometió con un portal informático de comercio electrónico que, según se dictó, empleó para desviar dinero público a cuentas personales. Por Rilco, la Zona Franca de Cádiz obtuvo subvenciones millonarias pero éstas, lejos de destinarse a la red de comercio electrónico, fueron a parar al exdelegado.
En la sentencia , el Supremo respaldó el pronunciamiento de la sentencia de la Audiencia gaditana sancionando los «abusos de poder» y la condena al exdelegado como responsable penal de fraude, prevaricación y malversación. «Nada lesiona más la confianza de los ciudadanos en sus instituciones que ver convertidos a sus representantes públicos en los vulneradores de la legalidad de la que ellos deberían ser los primeros custodios», destacó en el fallo el magistrado ponente Cándido Conde-Pumpido.
A Rodríguez de Castro le queda también pendiente la imputación por el 'caso Quality' y una segunda condena menor, de un año y medio, por delito fiscal.