EDUCACIÓN
Los 'novillos' pasan de moda
Caen las cifras de abandono escolar en Cádiz pero se mantiene el consumo de droga entre los más jóvenes
La crisis del ladrillo –que ha dejado de ser un reclamo para conseguir un sueldo seguro– y la incertidumbre laboral han frenado el abandono precoz de las aulas . Los tiempos difíciles obligan a modificar los modelos económicos y sociales y el efecto ha llegado hasta las aulas de colegios, institutos y universidades. Cádiz no se ha quedado al margen de esta realidad ya que se constata un descenso del abandono escolar y de los popularmente conocidos como ‘novillos’. Los últimos informes de la Policía Local indican que durante el primer trimestre del curso se han contabilizado 24 casos de ‘pellas’ que han tenido como escenario principal los institutos gaditanos. Un dato alentador pero que choca la veintena de denuncias por consumo o tenencia de estupefacientes que se han registrado en los alrededores de centros escolares.
Antonio Rivas , uno de los impulsores del Plan de Prevención de Situaciones de Riesgo en el entorno escolar matiza la diferencia entre ‘novillos’ y absentismo escolar. «Técnicamente para que éste se produzca tiene que haber una ausencia reiterada. Es decir, más de cinco faltas en el trimestre». El Inspector Jefe de Seguridad Ciudadana de la Policía Local y Francisco Luis Vaca , exdirector del IES Columela, llevan más de una década batallando para que los jóvenes sigan estudiando. «Uno de los picos más altos en la tasa de abandono escolar coincidió con la fecha en la que se implantó la enseñanza obligatoria hasta los 16 años. Los chavales estaban desmotivados y dejaban las aulas», explica Vaca.
Más recientemente también se detectó otro repunte cuando se produjo el ‘boom’ del ladrillo que arrastró a muchos jóvenes al sector de la construcción seducidos por un dinero rápido y fácil. Vaca insiste en la importancia trabajar en la prevención para conseguir que los jóvenes terminen con éxito la enseñanza obligatoria. Y para ello, es fundamental el trabajo coordinado y la implicación de todos los participantes en la Comisión municipal y provincial de Absentismo que están compuestas por técnicos del Área Municipal de Familia del Ayuntamiento, representantes de Centros Escolares, de las Asociaciones de Padres y Madres, de la Inspección Educativa y de las Delegaciones de Educación e Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía, Policía Local, Policía Autonómica y Fiscalía de Menores. Son datos alentadores y refrendan el buen hacer de las .
Comisiones locales y provinciales trabajan para controlar y reenganchar a los adolescentes que dejan de estudiar
El objetivo de Lisboa
Hace un año, el 28,4 por ciento de los andaluces entre 18 y 24 años dejaron los estudios sin llegar a graduarse en la ESO ni conseguir un título de Formación Profesional. Según los datos de la reciente Encuesta de Población Activa ( EPA ) correspondientes al tercer trimestre de 2015, la tasa se ha reducido un 3,3 por ciento hasta el 25,1 por ciento.
El reto es alcanzar en 2020 los objetivos establecidos en la Estrategia de Lisboa donde España se ha comprometido a disminuir su tasa abandono escolar hasta el 15 por ciento.
Por comunidades autónomas, Baleares es la que tiene un mayor porcentaje de jóvenes que no han continuado estudiando al finalizar la ESO (27,7%), seguida de Ceuta y Melilla (25,2%) y Andalucía (25,1%). En el lado opuesto, Navarra (10,7%), Cantabria (9,6%) y País Vasco (9,4%).
Pacto educativo
Una de las cuestiones que siempre están sobre la mesa de los responsables políticos es la necesidad de llegar a un acuerdo de Estado en materia educativa . Algunos docentes consultados por este medio inciden en la propuesta del Consejo Escolar de extender la obligatoriedad de la escolarización hasta los 18 años para evitar el abandono. Otros sostienen que la educación debe volver a ser competencia del Estado y no debe estar transferida a las comunidades autónomas. Todos, sin embargo, están de acuerdo en la necesidad de tener un sistema educativo estable y de calidad porque los sucesivos cambios de ley «conducen al fracaso» . También hay consenso en la limitación de medios existente en las aulas.
Los profesores reconocen que las herramientas digitales están lejos de ser el remedio milagroso para evitar el fracaso escolar pero las TIC sirven para empujar a los jóvenes a interesarse por el aprendizaje. Parece obvio que para unos alumnos que viven inmersos en un entorno interactivo resulte más atractivo disipar las dudas gramaticales consultando la versión ‘online’ del Diccionario de la Real Academia que acercarse a la biblioteca para ojear el tomo correspondiente. El problema actual es saber incorporar estas herramientas innovadoras en el nuevo concepto de educación y , para ello, la formación del profesorado es indispensable.
El maestro digital debe comprender internet, fomentar la interacción con los servicios educativos en línea y conocer técnicas innovadoras como la ‘gamificación’ un método que permiten aprender a través de juegos. Todos estos nuevos recursos y proyectos deben desarrollarse sin olvidar el objetivo final: mejorar la educación en las aulas y evitar el absentismo porque cuanto menor es el nivel de formación, mayor es el índice de desempleo.
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