Airbus Puerto Real
«Estamos en contra de cualquier acuerdo que recoja el cierre de Puerto Real como centro productivo»
Inmaculada Ortega llega a la secretaría provincial de Comisiones Obreras en un momento delicado para una Bahía amenazada por el cierre de la planta de Airbus
Inmaculada Ortega (1968. Los Barrios, Cádiz) es la viva imagen del cambio y la renovación en la delegación de Comisiones Obreras en la provincia de Cádiz. Su larga trayectoria en el sindicato y su formación avalan el liderazgo de la que será la segunda mujer encargada de tomar las riendas de la fuerza sindical en la provincia, sucediendo en el cargo a Lola Rodríguez.
Licenciada en Ciencias del Trabajo y diplomada en Graduado Social, Ortega cuenta con la experiencia necesaria para liderar un proyecto que contará con una Ejecutiva renovada y experimentada para abordar un futuro incierto para la zona. De momento, la amenaza del cierre de la planta de Airbus en Puerto Real se ha convertido en la primera batalla que le toque combatir. Después, llegarán muchas más.
–Para comenzar su mandato, se enfrenta a una nueva crisis industrial en la provincia, algo que viene marcando la actualidad desde hace décadas. ¿De qué manera se puede abordar para poner el freno?
–Antes de nada, me gustaría resaltar que nosotros partimos de una provincia que aporta la producción industrial bruta más importante de Andalucía y la segunda del país, detrás sólo de Tarragona, por lo tanto, lo primero que necesitamos es cambiar la percepción que existe sobre el mercado productivo de la provincia de Cádiz. Nuestro sector industrial es esencial para el empleo de esta provincia, sobre todo para la calidad del empleo, que no es comparable a otros sectores.
Tal y como has comentado, tenemos dos arcos industriales importantes, uno en la Bahía de Cádiz y otro importantísimo en la Bahía de Algeciras. Por eso, el empeño mío y de la organización que salimos de este Congreso es no perder el tren de la industria en la provincia. Es decir, evitar cualquier tipo de deslocalización, y lo que viene planteando la empresa Airbus para Puerto Real no deja de ser una deslocalización de la empresa, argumentada por las dificultades de poner en el mercado el A380, que es el tipo de producción que venía realizando esa planta, pero hay que ser conscientes de que el sector aeroespacial es un sector que no está en crisis y que esta circunstancia es coyuntural.
–¿Qué posibilidades hay entonces de salvar la planta, teniendo en cuenta que ya hay empresas auxiliares que han recibido avisos de cierre?
–La negociación empieza ahora. Nosotros vamos a exigir un proyecto o varios proyectos concretos para la planta de Puerto Real que conlleve el mantenimiento del empleo. Eso no significa que nosotros no valoremos el proyecto tecnológico 4.0, creemos que Cádiz no puede perder el tren de la tecnología porque estamos en una renovación tecnológica, más allá de la propia industria. Nosotros valoramos positivamente el acuerdo y la propuesta que hace el Gobierno a las organizaciones sindicales mayoritarias, pero ese proyecto específico no absorbe las necesidades de la planta de Puerto Real.
El lunes tendremos una reunión con la alcaldesa de Puerto Real; el martes tuve una reunión con el presidente del comité de empresa de Puerto Real. Nosotros vamos a seguir exigiendo en este período que se abre de negociación que la empresa ha venido a bien convocar, que tienen que venir proyectos concretos de futuro, que además ya los tiene Airbus. Y eso lo conoce muy bien los compañeros de la planta.
–Precisamente, la firma del acuerdo por parte de CCOO y UGT con el Gobierno ha despertado cierto malestar de la plantilla, porque no garantiza el mantenimiento de la planta de Puerto Real como centro de fabricación.
–El documento no dice tal cual eso. Desde nuestro punto de vista, el documento da lugar a confusión y eso lógicamente es lo que queremos que se aclare. Nosotros valoramos que se pone en valor por parte del Gobierno un proyecto tecnológico, pero ese documento no recoge la necesidad de que vengan proyectos concretos para Puerto Real.
Ya sabíamos desde el año 2019 que la producción del A380 no iba a seguir, pero estamos esperando que nos digan desde Airbus qué otros proyectos de los que tienen a corto plazo, se van a traer para Puerto Real. Nosotros, y me refiero al comité de empresa y a la sección sindical de CCOO en Puerto Real, hemos trasladado a la empresa cuál es la viabilidad de la planta. Creemos que competitivamente tiene un valor para el sector aeroespacial, que es la cercanía con la terminal de La Cabezuela, para abordar proyectos que conllevan una salida marítima.
–¿Qué papel puede tener la política en la supervivencia de la planta?
–Es importantísima la presión política, en este caso, del presidente de la Junta de Andalucía, para defender los intereses de la planta de Puerto Real y del sector aeroespacial andaluz. Y también es imprescindible la apuesta del Gobierno de España por la planta de Puerto Real porque si se apuesta por la cohesión territorial, conlleva también que se apueste por los territorios donde hay más tasa de paro.
«El proyecto tecnológico no absorbe las necesidades de la planta de Puerto Real»
No se pueden tener discursos que sean discordantes, y se lo trasladamos ayer al subdelegado del Gobierno en Cádiz, que por parte del Gobierno no sólo tengan en cartera un proyecto tecnológico que no se concreta claramente, sino que aquí hay que poner encima de la mesa proyectos que ya tiene Airbus, que en su reparto productivo, tiene que venir a Puerto Real. Y, entre esto, seguir manteniendo este año, lo que se está produciendo del 320, 330. La producción actual de los activos existentes se tiene que seguir manteniendo.
–¿Entiendo entonces que CCOO no va a permitir el cese de la actividad productiva y de fabricación en Puerto Real?
–Por supuesto que no. CCOO de Cádiz está totalmente en contra de cualquier acuerdo que recoja el cierre de la planta de Puerto Real como centro de fabricación. Tiene que ser un centro de fabricación. Y si se realiza, se realiza no sólo en contra de CCOO de Puerto Real, sino en contra de Andalucía. De ahí que creamos imprescindible en este camino la presión política de la provincia, la unidad política, administrativa y sindical. Nuestra gente de Airbus están peleando para que vengan proyectos productivos a Puerto Real.
–¿Se está siendo sincero y transparante con los trabajadores por parte de los sindicatos?
–Juanma Trujillo, sí. El que lo conoce, sabe que él va con la transparencia de explicar completamente todo. Otra cosa son las diferencias que podamos tener con compañeros de otras zonas, pero eso es lo que nos corresponde ahora, pelear por lo nuestro ahora. Y también es legítimo que otros peleen por lo suyo.
««Estamos peleando por proyectos productivos de Airbus para Puerto Real»
–¿Cree que el Gobierno no ha presionado lo suficiente en nombre de Cádiz?
–Los gobiernos están expuestos a muchas expresiones y quizás nosotros tenemos que presionar más desde Cádiz. Madrid está más cerca del Gobierno que nosotros. Quizás tenemos que hacer mayor hincapié, por eso pido unidad. Además, Puerto Real es una planta tremendamente competitiva, con una cualificación altísima de sus trabajadores y de la empresa auxiliar, que es importantísimo. Y ahora es el momento de echar la batalla y no se descartan movilizaciones. Las hemos paralizado por la negociación, pero no descartamos más movilizaciones.
–¿Cree que el centro tecnológico es simplemente una solución para acallar a los sindicatos o verdaderamente tiene proyecto de futuro?
–Yo sí que creo que tiene futuro porque estamos en una revolución tecnológica y ese tren no lo puede perder la provincia de Cádiz. Málaga supo ver bien hace diez años que la industria tecnológica eran el futuro de los mercados productivos y ahora nos lleva una ventaja en empleo. Nosotros partíamos con una tasa de paro similar, y ahora tienen ocho puntos por debajo de nosotros. Y eso se debe a su apuesta por la tcnología.
Pero creemos que es compatible el centro tecnológico, que tendrá su recorrido en el tiempo, con seguir manteniendo el centro productivo. Puerto Real tiene una nave para hacer parte de la cola del ensamblaje de los futuros aviones de Airbus que no la tienen otras plantas. Lo que no podemos despreciar un proyecto por defender el otro. Tenemos que defender los dos, por eso defendemos el acuerdo. Ahora bien, ese proyecto tecnológico tiene que venir acompañado del proyecto productivo, que no lo podemos perder.