Ayuntamiento Cádiz
«El equipo de Gobierno extermina» a una empresa social 37 años después
Sindicatos acusan al Ayuntamiento de abandonar a la «única cooperativa de trabajadores gaditanos», Numen, y dar sus tareas a firmas privadas o a Correos
Es una empresa social, una cooperativa destinada a dar trabajo a jóvenes en riesgo de exclusión. Ese fue su origen, en el Cerro del Moro, en 1984, hace 37 años. Desde su nacimiento, con Carlos Díaz de alcalde, siempre ha tenido la concesión de numerosos servicios de mensajería municipales . Se llama Numen y muchos vecinos de Cádiz la conocen, siquiera porque les ha llevado multas a casa. También han sido los encargados de traer y llevar cartas de Cultura, Aguas de Cádiz, Eléctrica de Cádiz, colegios, institutos, Emasa, Procasa, cofradías...
Llegó a tener 25 trabajadores en estas cuatro décadas de colaboración pero ahora apenas son de cuatro a seis, depende de la actividad. Porque su mercado no ha dejado de menguar en los últimos años. La digitalización del sector supuso un cambio, al que se adaptaron, pero el recorte de actividad progresivo de su principal cliente, el Ayuntamiento amenaza con hacerla desaparecer.
El sindicato Autonomía Obrera ha dado forma a esta denuncia: «Lo anunciamos el pasado mes de septiembre y no nos equivocamos, e l equipo de Gobierno de Adelante Cádiz va a consumar su despropósito y exterminar a la única cooperativa de trabajadores gaditanos , Numen Nuevos Mensajeros, tras más de tres décadas prestando el servicio de entrega de notificaciones del Ayuntamiento de Cádiz».
«Es lastimoso ver, como una cooperativa nacida hace más de 30 años en el barrio de Trille auspiciada y apoyada en sus comienzos por el PSOE de Carlos Díaz, que posteriormente la mantuvo durante 20 años sin problema alguno el PP de Teófila Martínez se ve en esta situación».
«La izquierda de la izquierda»
Autonomía Obrera (AO) achaca la responsabilidad a « esta «izquierda, infame y vergonzosamente llamada ‘izquierda de la izquierda’, la que antes de entrar a gobernar vendía a bombo y platillo la defensa a ultranza de la clase trabajadora y apostaba firmemente por las empresas de economía social y el cooperativismo entre trabajadores».
La denuncia sindical señala directamente a « la coalición de izquierdas que se autodenomina Adelante Cádiz con Kichi al frente, va a ser la mano ejecutora que la haga desaparecer esta cooperativa y deje en el paro a esas familias gaditanas de cooperativistas y trabajadores, además de provocar el despido de otros seis excooperativistas más, actualmente trabajadores subrogados en la empresa RDPost».
Su dura nota pública añade que «este equipo de Gobierno y sobre todo el alcalde, ya que la concejala de Régimen Interior, Eva Tubío, por su incapacidad manifiesta como política, ha pasado olímpicamente de los trabajadores desde el inicio a pesar de conocer la situación, siendo incapaz de dar una solución y alternativa a esta cooperativa de Cádiz».
«Traicionera y cobarde» Tubío
La acusación a la edil es concreta: «Mientras tanto, traicioneramente y cobardemente, (para eso si se ha prestado Eva Tubío), han estado negociando y acordando un contrato a dedo con Correos, solo para satisfacción de un técnico municipal a sabiendas de que era innecesario y de que dicho contrato provocaría automáticamente el despido de seis trabajadores (excooperativistas) actualmente subrogados en el Pliego de Condiciones de entrega domiciliaria municipal que gestiona la empresa RDPost en prorroga forzosa, este equipo de Gobierno conoce el mecanismo de adjudicación de Correos ya que no está obligado a subrogar al personal, provocando con ello y la desaparición definitiva de la Cooperativa y el despido de trabajadores».
Este equipo de Gobierno, a diferencia de los anteriores partidos políticos que gobernaron el Ayuntamiento de Cádiz «por su incapacidad e ineptitud, en vez de proteger y blindar a la única cooperativa de Cádiz , han provocado, ocasionado, permitido y bendecido que paulatinamente fueran perdiendo todos los contratos municipales, al no establecer mecanismos que favorecieran las licitaciones y provocando la desaparición, dejándolos abandonados y desprotegidos en los contratos y licitaciones contra grandes empresas, que tiran los precios por debajo de mercado a cambio de la precariedad de sus trabajadores, la cooperativa le es imposible competir».
Así ocurrió, asegura AO, en el 2018 cuando le adjudicaron el contrato de las notificaciones municipales a RDPost (el mismo que ahora adjudican a Correos), y que posteriormente continuó ocurriendo en otros organismos y empresas municipales. «A todo el equipo de Gobierno se le debería de caer la cara de vergüenza ante tanto engaño, frases de cara a la galería y nula protección a los trabajadores».