Laboral
Diputación se queda sin limpieza desde el 1 de febrero si las trabajadoras no cobran lo que se les debe
La quiebra de la empresa concesionaria Bilur afecta a 18 limpiadoras en el Palacio de la Plaza de España y en el Edificio Roma, además de otras 8 en la sede de la Delegación de Salud de la Junta
Las limpiadoras de Diputación denuncian que, además de los atrasos de sus nóminas, llevan semanas limpiando «solo con agua y en plena pandemia» porque la empresa dejó de mandarle material desinfectante
La Diputación Provincial de Cádiz se quedará sin servicio de limpieza a partir del próximo martes 1 de febrero . Las 18 personas (15 de ellas, mujeres) que realizan las tareas de higiene básica diaria en las sedes del histórico Palacio de la Aduana de la Plaza de España y del cercano Edificio Roma dicen que se plantan.
Así lo anuncia su portavoz, Josefa Jordán González, para denunciar los impagos que sufren desde que la empresa a la que la Corporación concedió el servicio, Limpiezas Bilur, quebrara el pasado 28 de diciembre. En esa fecha, la firma con sede en Baracaldo (Vizcaya), presentó su solicitud de ingreso en concurso de acreedores. La consecuencia directa es que las 18 afectadas en la Diputación no cobraron su nómina de diciembre. Otras ocho trabajadoras de la limpieza en la sede de la Delegación de Salud de la Junta de Andalucía, en la avenida María Auxiliadora, están en la misma situación. Otras tres empleadas en pequeñas dependencias de la Diputación en Jerez y Cádiz corren idéntica suerte. En total serían, al menos, 29 las personas que padecen la misma situación laboral.
Todas ellas afirman que no percibieron la nómina de diciembre y que ya el pasado 13 de enero recibieron sólo la mitad (58%) de ese sala rio , sin que sepan nada de lo que falta y con el fundado temor de no percibir el correspondiente a enero. De ahí la amenaza de las limpiadoras del Palacio de Diputación y el Edificio Roma, si el 1 de febrero no les ha llegado nada de lo que les deben, paran. Josefa Jordán detalla que responsables de la Diputación Provincial les han insistido en que están trabajando en la ruptura del acuerdo de concesión por los incumplimientos de pagos y por la entrada en concurso de acreedores , pero nada saben de los cobros atrasados ni de la futura empresa que podría hacerse con el servicio y subrogar los contratos actuales.
Como añadido, para ilustrar la situación que viven, las limpiadoras de Diputación denuncian que llevan ya tres semanas «limpiando con agua, nada más» puesto que la empresa en quiebra, además de las nóminas, dejó de enviar material como desinfectante. «En plena pandemia no parece la situación más segura, ni para los que vienen al Palacio de Diputación o al Edificio Roma ni para nosotras».
El reincidente caso de la Delegación de Salud
En el Caso de la Consejería de Salud en Cádiz, las ocho afectadas parecen condenadas a la inestabilidad laboral y la precariedad . Sin que se haya resuelto el trámite judicial por las nóminas pendientes desde 2020 con una antigua empresa concesionaria del servicio, Expertus, ahora denuncian estos nuevos impagos. Además de no saber cuándo van a cobrar la mitad de diciembre y todo enero, este grupo de limpiadoras aún tiene pendientes cobros y nóminas de esa anterior concesionaria . De hecho, el trámite judicial para reclamarlas no está fijado hasta el próximo otoño, con lo que acumularán dos años sin percibir salarios o pagas que no les fueron abonados, de forma completa o parcial.
A partir del pasado sábado, 22 de enero, según las afectadas en el caso de Salud, sí hay nueva concesionaria, al contrario que en la Diputación Provincial. En la sede de la Junta, el servicio de limpieza pasa a la empresa extremeña Aurum, con sede en Cáceres. Eso sí, nadie -afirman- les informa sobre el pago de las cantidades que les deben ahora, ni de las que se quedaron sin cobrar desd 2020. Los representantes de las limpiadoras tanto en Diputación como en Salud afirman que las administraciones contemplan un concepto de fianza cuando firman la concesión del servicio con cualquier empresa . Esa cantidad, reclaman, debería ser utilizada ahora para responder a los impagos que sufren.
Tanto la portavoz del colectivo de Diputación como el de Salud recuerdan: «Los salarios que percibimos, en algunos casos, son bajísimos y cualquier impago, cualquier retraso, nos impide afrontar pagos en nuestras casas que luego nos suponen recargos, intereses, embargos y todo tipo de dificultades. Algunos de los sueldos son tan pequeños que las compañeras no pueden permitirse ni el autobús para ir a trabajar . En otros casos, ese sueldo tan bajo es el único que entra en toda una familia». Como media, actualmente les deben unos 1.800 euros a cada una en la Delegación de Salud y unos 2.500 en Diputación, lo que en unas economías domésticas «que van al día» suponen muchos impagos y muchos problemas. «Diputación nos pide paciencia, pero nosotros no le podemos pedir eso al banco con la hipoteca, o al casero con el alquiler, o al cajero del supermercado», concluye Josefa Jordán.
En el caso de la Delegación de Salud y Familias de la Junta en Cádiz, fuentes oficiales de la dirección afirman que «han actuado de acuerdo a los mecanismos previstos en la normativa de contratación, agilizando al máximo los tiempos para evitar un mayor perjuicio» a las trabajadoras. Igualmente, defienden que las afectadas han estado informadas «en todo momento» de los pasos administrativos que se han dado para tratar de resolver la situación.