Cádiz
Después de la caravana del amor llega el autobús del empleo
El vehículo de una empresa privada, con apoyo municipal, recorre la provincia desde el lunes en busca de 200 empleados para cubrir ocho tipos de puestos de trabajo
Nacieron en los años 50, en América. La latina y la otra. Incluso hay precedentes en el siglo XIX, diversos, por medio mundo. Se hicieron célebres en los 90 en España y hasta en 2012 y 2019 hay rastro de ellas . La caravana del amor es un recurso extremo para propiciar el emparejamiento heterosexual en zonas despobladas, para tratar de impulsar el número de enlaces, paliar la epidemia de soledad y -muy dudoso dada la alta edad media de los participantes- el de nacimientos en parajes rurales -o urbanos como Cádiz- que pierden población a gran velocidad.
Consiste en organizar grupos de mujeres u hombres que llevar, todos a la vez, en un autobús, en una fecha concreta, a un lugar determinado en el que habría escasez de ejemplares del otro género. Que se encuentren y a ver. Vistos los números actuales, parece que la fórmula no ha funcionado.
La España que se vaciaba está más seca que nunca, la soledad mantiene cifras pandémicas y el número de niños sigue en caída libre. Con todo, la caravana era un chocante plan de choque y una foto de una época . A grandes males, malos remedios porque se queda en una anécdota ilustrativa tan útil como un litro agua en un incendio forestal.
Si los nuevos métodos de búsqueda de relaciones tradicionales, familia y descendencia revelan cómo estamos, los de trabajo también. En la teórica tierra del paro , en el territorio europeo que históricamente muestra el mayor número desempleados, en la provincia de Cádiz, desembarca una caravana del trabajo . Será este lunes 25 de abril. La llegada es el símbolo de una época nueva. Las cifras de desempleados cuentan que el número de solicitantes es tan alto como siempre pero desde hace meses -con la salvedad de la pandemia que alteró cada registro- no dejan de aparecer anuncios en los que se necesitan trabajadores.
Desde grupos de hostelería como Arsenio Manila, este martes , hasta la patronal hostelera andaluza reclamando 30.000 camareros en Semana Santa, de pequeños comercios del centro histórico a peluquerías, de firmas medianas de carpintería a servicios técnicos . Falta mano de obra de todo tipo. La hemeroteca reciente, desde 2020, contiene llamadas de la patronal de transportistas o de la construcción. Dicen que faltan trabajadores cualificados, tecnificados, actualizados, que hay plazas sin cubrir por miles . Si hay tantos pidiendo empleo y tantos empleos por cubrir, la conclusión es obvia: la capacitación, la formación y la comunicación entre oferta y demanda fallan de forma estrepitosa.
Llega el bus del curro
En esta situación, de forma paralela a los servicios públicos de empleo, llegan los intermediarios, los que trabajan en conectar a potencial empleador y posible empleado. En esta situación aparece la Ruta Cádiz Emplea, la caravana del empleo . Llega a Cádiz. Será este lunes 25 de abril. Empezará por la capital, luego Jerez (26 de abril), y consecutivamente en cada día laborable hasta el 5 de mayo, Chipiona, Prado del Rey, Tarifa, Vejer, Jimena y San Roque.
De 09.30 a 17.30 cada jornada, la empresa Clece , con la colaboración directa de todos los ayuntamientos mencionados, incluyendo el capitalino, gobernado por Anticapitalistas, ofrece 200 puestos de trabajo de forma ininterrumpida. Se puede aspirar presentándose en el vehículo, por vía digital o por teléfono (900 82 85 11). Las plazas ofertadas son de auxiliar de ayuda a domicilio, gerocultor, personal de limpieza, vigilante de seguridad, enfermero, psicóloga, auxiliar administrativo y técnica de sistemas.
Con los precedentes de este tipo de rutas en otras provincias, Jaén fue la última, Clece espera atender a unas mil personas diarias como media . En la provincia, por tanto, esperan recibir 8.000 para los 200 empleos, uno de cada 40 puede ser seleccionado. En la presentación, celebrada este martes en el Hotel La Catedral, los representantes de Clece aseguraron que tendrán prioridad los solicitantes de colectivos vulnerables: disfunción física o psíquica, víctimas de violencia de género y situación de exclusión social.
Si el lema de las viejas caravanas de casamenteros era «lo que necesitas es amor», en las laborales habrá que adaptar: lo que necesitas es un buen trabajo. O un buen trabajador, según desde qué lugar se mire.
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