Covid Cádiz
Pepe ve la luz nueve meses y 53 médicos después
El paciente de Covid que más tiempo ha pasado en el hospital Puerta del Mar de Cádiz recibe el alta entre aplausos
Pepe Valle ha visto la luz nueve meses y 53 médicos después. Este jerezano de 52 años , el paciente de Covid que más tiempo ha pasado ingresado en el hospital Puerta del Mar de Cádiz, recibió el alta el jueves entre aplausos y tras un largo periodo de recuperación.
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Allí ingresó el 17 de noviembre de 2020, en la etapa más dura de la pandemia, cuando se disiparon los aplausos y el espíritu del confinamiento. Pepe se convirtió en un nuevo símbolo de resistencia para el hospital , una muestra de superación que ha inspirado a decenas de auxiliares, celadores, enfermeros y médicos, quienes le vieron al borde de la muerte hasta en cuatro ocasiones. Tras superar el virus llegaron las secuelas, infecciones, recaídas y un largo periodo de recuperación.
Los sanitarios colgaron en las paredes de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) el reportaje impreso en el que este periódico contaba hace unos meses su historia , ligada a una vela encendida junto al Cristo de la Coronación de Espinas. Los miembros de la hermandad jerezana se han encargado de rezar por él y de mantener encendida aquella luz con la fe de que Pepe volviese a ver en procesión el paso que cargó durante tantos años.
Este jueves rozaban las cuatro de la tarde en plena ola de calor, pero muchos de los sanitarios interrumpieron sus vacaciones para acudir al hospital a despedirle. Pepe ha pasado por cuatro plantas y ocho habitaciones diferentes en las que ha conocido a media plantilla: le han tratado directamente hasta 53 médicos , con los que ha convivido durante cuatro de las cinco olas de la pandemia.
La peor, dice, fue la tercera, cuando una compañera de habitación perdió a su padre y a su madre. Llegaron a fallecer once personas en un día. El jerezano ha sido testigo directo de la evolución de la pandemia, con el desgaste psicológico que ello conlleva. «Nos ha pesado mucho, no tienes fecha de volver a casa. Con el paso del tiempo me cruzaba con gente andando por los pasillos y me decían 'qué rabia, llevo aquí un mes'. Yo les decía: '¡pues yo llevo ocho'! Imagina las caras que ponían», recuerda.
El paciente estuvo al borde de la muerte hasta en cuatro ocasiones; más tarde pasó por varias recaidas y un largo proceso de recuperación
Junto a su mujer, Gema, quien le ha acompañado cada día en esta batalla, Pepe se despidió uno a uno de los trabajadores del hospital. «Nos hemos hartado de llorar. Es extraño, pero además de la alegría nos hemos despedido con pena», decía su esposa a la salida.
La pareja insiste en su agradecimiento eterno a todos los sanitarios , a los que considera ya «parte de su familia». Junto a ellos han celebrado su aniversario de boda, cumpleaños y otros momentos que animaban al paciente y motivaban al personal a seguir luchando contra el virus.
En la entrada al hospital Puerta del Mar esperaban también las hijas y los padres de Pepe, visiblemente emocionados. El primer recibimiento sólo era la antesala de la gran fiesta que la familia había organizado a su regreso a Jerez , con pancartas, aplausos y más lágrimas.
«Psicológicamente estoy muy tocada, también físicamente... Hemos envejecido mucho en estos nueve meses, pero gracias al apoyo de los sanitarios lo hemos sobrellevado», apunta Gema, quien desde el primer momento confió en la fortaleza de su marido.
Nunca perdió la esperanza, ni tan siquiera el día que le dijeron que se preparase para lo peor. Cuando despertó del coma, incluso auguró que con el paso del tiempo volvería a caminar. Este jueves salió del hospital y pudo soltar el andador por unos instantes para abrazar a su familia. La rehabilitación será su último paso en el camino para alcanzar la luz al final del túnel.
