Carnaval de Cádiz 2022
Las calles de Cádiz cantan por su Domingo de Carnaval
El apoyo de los carnavaleros y turistas sigue firme durante la segunda jornada de la celebración en su formato 'ilegal'
Buen ambiente de domingo en Cádiz. La tacita de plata comenzó a inundarse con el goteo constante de viandantes que completaron las calles del centro. Muchos rezagados, o indecisos, que no sabían si el Carnaval ilegal iba a poder producirse, o si éste resultaría exitoso, terminaron de convencerse tras presenciar las imágenes de la jornada anterior.
Muy pronto, antes de la 13:00 de la tarde, el centro de la capital ya se encontraba completamente tapado por visitantes que, con disfraz o sin él, comenzaban a contagiarse de la atmósfera festiva, mientras que los operarios de los servicios de limpieza proseguían en sus quehaceres tras culminar el Sábado de Carnaval.
Domingo de Carnaval
Los actos oficiales del Carnaval ilegal de febrero, organizados por la plataforma Coordinadora por el Carnaval , se llevarán a cabo hasta el próximo 6 de marzo (Domingo de Pirata), aunque la mayoría de las actividades se concentran en sus primeras cuatro jornadas.
Para este Domingo de Carnaval, desde el colectivo está previsto que se celebre, desde las 14.00 de la tarde, el Encuentro de Callejeras en la Plaza de Candelaria , coordinado por la Peña La Estrella. A la misma hora, se producirá la actuación de agrupaciones en la calle Zorrilla y alrededores, así como las coplas de las Agrupaciones y Antologías Carnavalescas en Peña Paco Alba, alrededor de las 14.30.
Por la tarde, en colaboración con hosteleros y la Federación de Peñas Caleteras, la calle La Palma será escenario de diversas agrupaciones ilegales hasta las 22.00 de la noche . Asimismo, el Carnaval saldrá del centro y llegará hasta el Chiringuito El Potito (paseo marítimo) a partir de las 18.00. Desde esa misma hora, hasta la madrugada, se celebrará la segunda jornada del Concurso de Máscaras por las calles del casco antiguo de la ciudad, principalmente siguiendo el itinerario del antiguo Paseo Vermout: Plaza del Mentidero, Veedor, San Antonio, Ancha, Novena, Palillero, Columela, San Francisco, Nueva, San Juan de Dios, Pelota, Catedral, Compañía… hasta la Plaza de Las Flores.
Y durante todo el día, recorrido de Romanceros y Agrupaciones ilegales principalmente por las calles del casco antiguo parando entre otros lugares en Plaza El Palillero, escalinata de Correos, Plaza de las Flores, puerta de la Torre Tavira, Sargento Daponte, Pasquín, Callejones, Armengual (San Lorenzo), Mateo de Alba, Portería de Capuchinos, Macías Retes, Paco Alba, Sagasta, placita del Oratorio de San Felipe, puerta del Teatro de la Tía Norica, Arco del Pópulo, Rosario, Vargas Ponce, Posada del Mesón… Todo ello sin contar los espectáculos privados en los locales Café Teatro Pay-Pay (El Pópulo), Momart (Punta San Felipe) o El Potito y la Sala Serendipia en extramuros.
Un Carnaval muy de Cádiz
Alejados del bullicio del centro, la Caleta y el paseo marítimo fueron ventanas de socorro para aquellos que preferían disfrutar de un domingo más sosegado y sin tanto ajetreo. El buen tiempo atrajo a numerosas personas, las más intrépidas incluso se bañaron en las aguas del Atlántico.
Cádiz es una ciudad para todos los gustos. A escasos metros del Balneario Nuestra Señora de la Palma y del Real, en el Parque Genovés , un coro empleó uno de los templetes como improvisado escenario ilegal para cantar sus coplas. Alrededor de las tablas, centenares de personas escuchaban con devoción. Al término del repertorio, los integrantes recibieron todo tipo de elogios e incluso los espectadores cantaban aquello de «campeones, campeones» .
«¡Qué bonito está mi Cádiz cuando llega el Carnaval!» , entonaron, espontáneamente, a una chirigota ilegal en las escalinatas de Correos. La ciudad brilla con otra luz en febrero, se lo dicen los gaditanos y se lo diría más gente si estuviera mejor organizado.
La falta de oficialidad vuelve a ser la nota negativa en la segunda jornada de esta semana de celebraciones. « No sabemos a dónde ir . Dicen que están por las calles del centro, pero cuando llegamos la chirigota ya termina de cantar», expresan unos turistas de Madrid que esperan sentados en los escalones de un solitario Oratorio de San Felipe Neri . No es que haya pocas ilegales, es que la programación depende exclusivamente de ellos, de su esfuerzo y del ingenio de las peñas y locales por tratar de animar el cotarro.
Asimismo, al no existir refuerzo en el transporte público, los trenes con destino en Cádiz dejaron condenables imágenes de aglomeraciones en espacios cerrados. Nadie quería perderse los carnavales, eso se sabía y podría haberse previsto para actuar tal y como se venía haciendo en las ediciones pasadas.
El Carnaval de febrero sigue sumando adeptos. Este Domingo de Carnaval ha dejado menos imágenes de botellones y más de verdaderos amantes de las letras. Una jornada más tranquila, a pesar de contar con una evidente mayor masa de público.
«Se equivocaron al suspender el Carnaval»
Con dudas, con muchas dudas encaraban los autores la celebración de este Carnaval ilegal. A juzgar por las caras de los copleros, todo esfuerzo está mereciendo la pena. «Tenemos muy buen ambiente, cada hora que pasa llegan más personas, con o sin disfraces. Ya en el Sábado de Carnaval acabamos muy satisfechos , hay que tener en cuenta que, comparado con los años anteriores, el cansancio por querer acudir o ver toda la final del Falla impedía que la tarde del día siguiente fuera de lleno total. Este año, pese a ser un carnaval ilegal y la pandemia, está siendo un éxito y esto solo es el principio», expresa Miguel Villanueva , presidente de la Asociación de Autores del Carnaval de Cádiz.
Como representante de la Coordinadora, plataforma responsable de la organización de este Carnaval de Cádiz en febrero que está conformada por diversos colectivos, Villanueva lamenta la decisión adoptada por el Consistorio. « El Ayuntamiento no nos consultó nada, fue una falta de respeto a un colectivo que cuenta con más de 400 asociados. Aparte de eso, nosotros teníamos una idea muy clara: el Carnaval es en febrero. Tomar la decisión en octubre era muy complicado, yo lo comprendo. Pero se debería haber apostado ahora por el cambio de fecha, con todas las consecuencias, y siempre dejando una puerta abierta, en el caso de que hubiese sido realmente desaconsejable. Lo que no puede ser es que todos los municipios de Cádiz tengan su carnaval oficial, su pregón oficial y sus actos oficiales y la capital lo deje todo para junio. En el caso del concurso, lo entiendo. Pero la semana de Carnaval es en febrero, el concurso lo podrían poner en junio, en julio, en agosto, o cuando quisieran».
Para el presidente de los autores, « se ha antepuesto la voz, o el interés, de alguien en particular . No digo que haya sido con mala fe, ni mucho menos. No obstante, cuando un político toma decisiones, tiene que contar con muchos datos y opiniones sobre la mesa. En este caso concreto, debería contar con las opiniones de toda la gente que estamos detrás del Carnaval. Esta celebración, además de cultural, tiene muchos intereses económicos y sociales. Fue una decisión muy precipitada».
Estas iniciativas, recalca, «son muy fáciles verlas a toro pasado, hay que tomarlas después de hablar y consensuar con verdaderos representantes y no decidir desde una mesa camilla. Estamos hablando del Carnaval, de la calle, una fiesta de participación».
«La situación con respecto a 2021 no se puede comparar», considera Villanueva. «No hay nada parecido; ni en el número de contagios por coronavirus ni en la gravedad de los mismos. Suspender el Carnaval de 2021 era lógico y normal, lo más apropiado dentro de lo doloroso que fue. Este año, no ». El hecho de que se esté celebrando el Carnaval en otros municipios solo hace justificar su opinión, «todo el mundo está viendo cómo los grupos salen a cantar fuera y se marchan de Cádiz, la gente no es tonta».
Villanueva considera que «se equivocaron al suspender el carnaval». Además, el presidente solicita al alcalde de la ciudad, José María González Santos 'Kichi', que «reflexione y tenga autocrítica. Los partidos deben hacer autocrítica cuando se equivocan, para algo son nuestros representantes».
«Ha sido un año muy difícil por diferentes circunstancias, pero ya estamos aquí por fin»
Aunque atípico, reducido e ilegal, el Carnaval de 2022 será recordado como el del reencuentro. Los aficionados vuelven a pasear las mismas calles en busca de sus ansiadas coplas. Los autores aguardan en las mismas esquinas a aquellos espectadores a los que poder dedicar las letras que, con tanto esfuerzo y cariño, han construido para esa edición. Esta es la fórmula del carnaval. Tras un año de ausencia, por la dichosa pandemia, el coronavirus ha abierto la puerta a que los grupos retomen su actividad, aunque toda su rutina sigue muy lejos de poder ser considerada como normal.
Cuando una ilegal decide dar el paso de salir a la calle a pregonar sus coplas por la capital de la provincia, lo hace aceptando todas las complejidades que van intrínsecas a esa elección. Cuando ésta recula, no es por mero capricho o timidez, sino porque sabe que no podrá ofrecer un repertorio a la altura de tan sagrado escenario.
Eso mismo fue lo que le pasó por la cabeza a Manuel García Rey , mejor conocido en el mundillo como 'Pato' . El coplero renunció a salir durante los últimos dos años de Carnaval «legal» y aceptó la suspensión en 2021. Este año regresa «con toda la fuerza del mundo» para mostrar su talento como autor e intérprete de la chirigota 'Los enteraos'.
El grupo tiene su solera y mantiene su esencia para este 2022, «llevamos saliendo desde infantiles y se ha ido incorporando más gente, antes estábamos siempre en la Peña Agustín González 'Chimenea'», comenta Manuel García Rey. Esa experiencia le ha servido al conjunto para superar las numerosas adversidades de los últimos meses.
« Ha sido muy complicado prepararse para estos carnavales . Empezamos los ensayos muy pronto, en septiembre, pero tuvimos que suspenderlos porque algunos se contagiaron de coronavirus. Este año ha sido más duro que nunca», explica el autor.
Las penurias activaron el ingenio. Si en los peores tiempos de la pandemia las empresas recurrieron al teletrabajo para proteger a sus empleados; los autores han optado por el «telensayo» . «Yo les mandaba las letras por teléfono y ellos iban practicando, ha sido diferente, pero nos ha servido».
La «rumba del malpensao» sonará por las calles del centro de Cádiz durante febrero y la primera semana de marzo. Los copleros esperan «bastante afluencia» de público, a pesar de la situación y de la ilegalidad de la festividad.