El Ayuntamiento se harta del deterioro del Club Marte

Es un peligro, una amenaza . Se han producido desprendimientos de fragmentos de piedra ostionera y el Ayuntamiento de Cádiz parece haber llegado al límite de su paciencia. O la Demarcación de Costas hace obras de seguridad urgentes o las hará Urbanismo y le pasará la cuenta a la administración estatal.

Es el aviso lanzado este viernes por el primer teniente de alcalde Martín Vila sobre el deterioro que presenta el Baluarte del Orejón, la estructura que rodea al acceso a La Caleta por el Paseo Fernando Quiñones y que, parcialmente, acogiera el Club Marte hasta su clausura hace unos años.

Vila se declaró cansado de pedir las reformas necesarias y aseguró que dentro de unas semanas o meses habrá llegado el momento de dar un paso distinto si no hay una respuesta. Esta especie de ultimátum ha sido aprobado por la Junta de Gobierno Local.

El delegado de Urbanismo afirma que su única intención es « evitar el evidente peligro de caída de piedras de la muralla del Baluarte del Orejón, tanto del lado derecho como del lado izquierdo de la puerta de La Caleta».

Para evitar ser «responsables de los daños que puedan ocasionarse en personas y bienes», se exige que comiencen cuanto antes las obras de reforma y seguridad «con un plazo de un mes para ejecutarlas».