SUCESOS
Dos años de prisión para una 'mulera' que llevaba encima más de 200 papelinas de cocaína en Cádiz
La procesada fue detenida cuando fue sorprendida en una escalera de un punto de venta muy activo de la Plaza Arillo
La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Cádiz ha condenado a una mujer que fue interceptada por agentes de la Policía Nacional en Cádiz con más de 200 papelinas de cocaína encima.
En la sentencia, la Sala da como hechos probados que S. F. L., con numerosos antecedentes por delitos contra la salud pública y contra el patrimonio, se encontraba el 27 de diciembre de 2017 sobre las once de la mañana en el rellano de la escalera de una vivienda de la Plaza Arillo de la capital gaditana. La mujer, de 40 años, se había quedado dormida, tendida frente a uno de los pisos, que habitualmente, funcionaba como punta de venta al menudeo en Cádiz.
Agentes de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) de la Comisaría Provincial acudieron al aviso alertados por los vecinos de la finca que ya se habían quejado en multitud de ocasiones por la continua entrada y salida de este piso de toxicómanos. Una vez allí, los agentes sorprendieron a esta persona en estado somnoliento y procedieron a registrar el bolso que portaba. En él encontraron las 208 papelinas de 'rebujito' -mezcla de cocaína y heroína- y una pieza de roca de cocaína de unos 19 gramos, además de dos teléfonos móviles y otros objetos. El valor de la droga incautada ascendía a 3.460 euros. Según el fallo, la acusada la portaba encima para hacérsela llegar a su verdadero dueño, otro viejo conocido de los agentes, actualmente en prisión tras caer en otro operativo contra el tráfico de drogas.
Como destaca el tribunal, tras oír en juicio el testimonio de la procesada y el de los agentes más otras pruebas procesales que se han tenido en cuenta, S.F.L. debido a su gran adicción se dedicaba a lo que en el argot se denomina «ser mulera», es decir, simplemente la portaba para hacerla llegar a un tercero. Aunque la acusada negara que la sustancia la tenía en su bolso y que en realidad los agentes la encontraron en un buzón del portal, dicho extremo fue desementido por todos los agentes que intervinieron. «Todas las declaraciones han sido coincidentes y sin fisuras en el sentido de que acudieron avisados por los vecinos porque existían múltiples quejas de que en dicho bloque se traficaba con sustancias estupefacientes».
En este caso concurre la circunstancia eximente incompleta dado el «indiscutible» estado de intoxicación en el que la mujer se encontraba cuando fue detenida, estado que además concuerda con el historial de adicción referido por la práctica totalidad de los agentes y que también concuerda con su historial médico.
Por tanto, ante los hechos ocurridos y teniendo en cuenta todas las pruebas aportadas, la Sección Tercera ha condenado a esta mujer a dos años de prisión y una multa de 3.500 euros por un delito contra la salud pública.