Ambiente tenso en el pleno del debate de la ciudad de Cádiz

El ambiente en el debate del estado de la ciudad, el primero de la era Kichi, ha sido irrespirable. Desde primera hora de la mañana se han producido interrupciones por parte de vecinos desesperados por su situación social y económica. Tanto que ya en la primera parte de la sesión, el alcalde ha tenido que desalojar a una pareja de gaditanos que reclamaban a gritos una solución para sus problemas.

Tras dicho desalojo, el debate continuó con relativa normalidad. Y durante este lapso de tranquilidad el alcalde de Cádiz pudo argumentar que su gobierno arrastra la herencia del PP, de la deuda, los gastos en publicidad, los «mamotretos» y las grandes obras que, a su juicio, no han beneficiado a la ciudad como es el caso de la Pérgola Mirador de Santa Bárbara.

Pero la paz duró poco y cuando la oposición detallaba su propio balance de la situación de la capital gaditana, el público presente en el Salón de Plenos del Ayuntamiento de Cádiz, ha vuelto a interrumpir el debate enarbolando pancartas reivindicativas y con gritos a pleno pulmón.