Manolo Santander
Se nos fue la alegría del barrio
Nunca supe su edad ni me importaba, por ella los años no pasaban
Y se nos fue Carmela, se nos fue la alegría del barrio . Sin avisar, sin esperarlo, por lo menos para mí. Pues no noté ningún cambio en ella que me avisara de este fin.
Siempre la veía igual , desde chico, nunca supe su edad ni me importaba, por ella los años no pasaban . Para un par de generaciones de viñeros ella era esa muchachita que se iba enamorando de cualquier chaval vestido de uniforme .
La princesa del barrio esperando su príncipe azul. Aunque he de reconocer que más de una vez pensé que ella fue la que de verdad paró el maremoto . La echaré de menos, echaré de menos esos gritos mañaneros de ¡ Manolo, te quiero, guapo ! que me alegraban el día. Echaré de menos esos besos sonoros de abuela que te llenaban toda la cara, la echaré de menos.
Adiós, Carmen Gutiérrez Carrera, adiós mi Uchi .