2021: El año en el que Kichi quiso cambiarlo todo en Cádiz

Además del empleo y la vivienda, los «vecinos y vecinas de Cádiz» (como le gusta al alcalde llamar a los gaditanos y gaditanas) asisten al deterioro de una ciudad en la que el mantenimiento de las calles, las plazas, los jardines, los equipamientos o el patrimonio en general, es muy mejorable; en la que urge un nuevo contrato de limpieza y un transporte público más moderno y ecológico; donde se necesita una solución real al problema de las personas sin hogar y una clara apuesta por el sector turístico, la hostelería y el comercio. Una ciudad que necesita unos nuevos presupuestos de recuperación, participativos, donde se contemplen inversiones en todos los barrios y una mejora en la comunicación y relación con las asociaciones de vecinos.

Pero Kichi y su equipo han centrado gran parte de sus esfuerzos durante este año en otros asuntos. Concretamente, en los cambios, argumentando la necesidad de cumplir con la Ley de Memoria Histórica y de borrar de la ciudad todo resquicio del franquismo.

Tras un proceso participativo en entredicho y con varias denuncias ante el Consejo de Transparencia y Protección de Datos de Andalucía por una posible vulneración de la Ley de Protección de Datos, Kichi conseguía por fin cambiarle el nombre al Estadio Carranza . El 24 de junio anunciaba que ‘Nuevo Mirandilla’ fue la opción más votada por los 1.068 registros válidos en esta votación.

Para el equipo de Gobierno, Ramón de Carranza , «fue un personaje que participó en el Golpe de Estado de 1936, que estuvo estrechamente vinculado a la dictadura franquista y que contribuyó activamente en la política de depuración que llevó a cabo el régimen en Cádiz».

Este cambio en el nombre del estadio ha contado con las críticas de aficionados, ciudadanos y grupos de la oposición, que aseguran que siempre seguirán llamándole Carranza.

Dentro de esta política de cambios, también ha destacado el cambio de 29 nombres de calles, plazas, avenidas y glorietas de Cádiz, propuesta conjunta del equipo de Gobierno y del PSOE que fue aprobada en el pleno del pasado mes de noviembre.

Se han sustituido los nombres de esta treintena de calles con el objetivo de que la mujer ocupe un papel más relevante en el nomenclátor de la ciudad ya que, de las 29 calles, un total de 21 tienen el nombre de una mujer.

Asimismo y, según explicó el Gobierno local, se ha apostado por eliminar nombres relacionados con el franquismo y por reconocer la lucha de los trabajadores y trabajadoras del metal rotulando la calle Ramón Franco como calle del Proletariado del Metal .

Eso sí, también se ha aprovechado en esta criba para eliminar nombres relacionados con la monarquía. Concretamente, ha desaparecido del callejero gaditano el paseo Príncipe de Asturias , en el barrio de Astilleros, que ha pasado a denominarse Luis Arenal Prat en honor al conocido dirigente vecinal que tanto luchó por los vecinos de esta zona de la ciudad.

Siguiendo con la Ley de Memoria Histórica, el equipo de Gobierno de Kichi procedió a la retirada de la placa en honor al ilustre escritor José María Pemán de la fachada de la casa en la que nació, situada en la calle Isabel la Católica. Un nuevo paso para borrar el recuerdo de Pemán de las calles de la ciudad como ya hizo el año anterior, en pleno Carnaval de Cádiz y sin previo aviso, con el busto del escritor gaditano que se encontraba en el interior de ese mismo edificio, que actualmente es una de las sedes de la delegación de Asuntos Sociales del Ayuntamiento gaditano.

En esta particular cruzada contra José María Pemán, también está la eliminación del nombre del teatro de verano situado en el parque Genovés. El equipo de Gobierno lo ha bautizado ya como el nuevo Teatro del Parque , actualmente en fase de construcción gracias al millón de euros recibido tras la firma de un convenio con la Universidad de Cádiz para fortalecer el cinturón universitario. Esta obra, junto con la del Museo del Carnaval y la de infraestructuras hidráulicas (tanto en abastecimiento como en saneamiento) que se están llevando a cabo por parte de Aguas de Cádiz en la avenida de Astilleros, son de las pocas actuaciones que tiene en marcha el Ayuntamiento en la ciudad.

Y volviendo a Pemán y al especial empeño de Kichi y su equipo de borrar su memoria en Cádiz, el pasado miércoles se aprobó (con el apoyo del PSOE) la revocación de su título como Hijo Predilecto de la ciudad. Además, la de otras 14 personas relacionadas con el franquismo.

Este punto contó con la ausencia tanto del debate como de la votación de los seis concejales del Partido Popular, que se desconectaron de la sesión telemática «por coherencia» alegando que ya lo hicieron en el pleno en el que se aprobó el cambio de las 29 calles porque se les había calificado de «fascistas».

Pero sin duda una de las polémicas más comentadas en este año ha sido el aplazamiento tanto del Concurso Oficial de Agrupaciones Carnavalescas (COAC) como de la fiesta en la calle de febrero al mes de junio. El alcalde y su concejal de Fiestas, Lola Cazalilla, hicieron una apuesta clara por anteponer la salud a esta fiesta aún a riesgo de contar con un desgaste político. La medida ha sido muy criticada y, aunque en estos momentos estamos inmersos en plena sexta ola, todo parecía indicar que habría Carnaval en febrero (no oficial) y así lo habían manifestado las agrupaciones callejeras.

Ahora, con el notable aumento de los contagios experimentado tras el puente de diciembre, todo está en el aire .

No obstante, ante la posible avalancha de público en Cádiz en febrero (siempre que la situación sanitaria lo permita) la calle ha empezado a organizarse por su cuenta. Es más, incluso se ha creado una coordinadora denominada ‘Carnaval de Cádiz en febrero’ , integrada por varios colectivos de la ciudad (autores, hosteleros, peñas, asociaciones u hoteles), que ya han tenido una primera toma de contacto para organizarse y ofrecer una alternativa para la fecha tradicional de esta fiesta.

Para el sector turístico, el Carnaval suponía un auténtico salvavidas del primer trimestre del año para aguantar hasta la Semana Santa y la época de las ferias y celebraciones de mayo. Un sector que clama por una apuesta clara por parte de las administraciones por convertir a Cádiz en un destino de excelencia .

El Plan Estratégico de Turismo del Ayuntamiento, presentado este año y que hasta ahora está plasmado solo en el papel, será una prueba definitiva porque esta claro que el turismo es el motor principal para la creación de empleo y riqueza.

Y la Sail GP fue una prueba de ello. Porque Cádiz, rodeada de mar, tiene que apostar también por los deportes náuticos ya que pueden suponer un gran potencial para esta ciudad.

Una ciudad cada vez más empobrecida a tenor del último anuncio realizado por el alcalde respecto a que es la segunda capital de provincia en inversión por habitante en asuntos sociales según un estudio elaborado por la Asociación de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales de España.

Los gaditanos, más que ayudas, necesitan más formación y más empleo para reducir esas políticas asistencialistas que el equipo de Gobierno de Kichi estaba dispuesto a cambiar cuando llegó a la Alcaldía.