Provincia
La provincia homenajea la figura de Miguel Ángel Blanco
Los dirigentes del PP jerezano han sostenido durante el acto que quieren ser «la voz de los buenos» frente a los que se ponen «de lado de los que ampararon y justificaron a los verdugos»
Este domingo 10 de julio se cumplieron 25 años del asesinato de Miguel Ángel Blanco a manos de la banda terrorista ETA . Un cuarto de siglo después y como cada año, el Partido Popular de Jerez ha rendido su particular homenaje al joven concejal popular de Ermua, cuyo asesinato conmocionó a toda España , y a todas las víctimas del terrorismo nacionalista vasco. El acto ha tenido lugar frente al monumento a las Víctimas del Terrorismo, situado en la plaza del Caballo.
Durante su intervención, la diputada nacional María José García-Pelayo afirmaba que en la jornada anterior se emocionó al oír a Marimar Blanco, hermana del concejal asesinado, en el homenaje de Estado que se celebró en la localidad natal del mismo. «Tenemos que defender la dignidad de las víctimas», ha sostenido García-Pelayo, quien parafraseaba a Marimar Blanco a la hora de pedir el respeto que merece su recuerdo.
En este sentido, la diputada nacional ha explicado que dicho respeto consiste en «ponerse de lado de las víctimas y no de los que ampararon y justificaron a los verdugos». Asimismo, ha señalado que su partido quiere «ser la voz de los buenos, no pactar con los malos», y que por ello este recuerdo de homenaje a la memoria de Blanco y de todas las víctimas de ETA se repetirá en años venideros «por la memoria, dignidad y justicia que las víctimas y sus familias merecen», según ha concluido García-Pelayo.
El presidente provincial del PP de Cádiz, Bruno García, también ha asistido al homenaje en el que se recordó «un momento triste, pero a la vez histórico» porque, entiende, este crimen conllevó un cambio de «la sensación que teníamos frente al terrorismo» y generó una «mayor unidad». García hizo una clara referencia a los pactos del presidente del Gobierno con Bildu para asuntos como, por ejemplo, la Ley de Memoria Democrática: «Pedro Sánchez ha elegido como socios preferentes a aquellos que no fueron a las manifestaciones» que exigían la liberación de Miguel Ángel Blanco .
García también quiso hacer hincapié en que el recuerdo de lo que sucedió hace 25 años debe seguir presente tanto para quienes vivieron en primera persona aquel asesinato como para las nuevas generaciones.
Lectura de manifiesto
El acto comenzó con la lectura del manifiesto redactado por la Fundación Miguel Ángel Blanco por parte de Leopoldo, miembro de las Nuevas Generaciones del PP de Jerez. María José García-Pelayo explicaba que, tradicionalmente, el manifiesto siempre lo ha leído uno de los militantes más jóvenes con el objeto de ejemplificar que «el recuerdo de las víctimas permanece y no cae en el olvido».
Durante la lectura del mencionado manifiesto, se recordaron las angustiosas horas que transcurrieron desde el secuestro del joven concejal hasta su cruel asesinato. «España entera estuvo pendiente del destino de un joven de 29 años», leyó Leopoldo, para acabar presenciando « con indignación un asesinato a cámara lenta ». A día de hoy, este suceso sigue erizando la piel de los españoles que vivieron aquel 10 de julio de 1997. Tras el acto, algunos de los presentes comentaban con detalles dónde se encontraban aquel día y cómo lo recordaban.
El secuestro y posterior homicidio de Blanco generó una reacción casi unánime de la sociedad española, que dijo ‘basta’ a la actividad terrorista y criminal de la banda: « por sus especiales circunstancias, desató un clamor social contra ETA », proseguía el manifiesto, en el que se destacó la unidad y valentía de gran parte de la sociedad en aquel momento para exigir el fin del terrorismo.
La figura del joven concejal y su fatal desenlace se erigieron, por aquel entonces, como un símbolo de la lucha frente a los terroristas y del anhelo de paz y libertad. Hoy en día, 25 años después, su memoria y recuerdo siguen representando estos valores: «Miguel Ángel representaba la libertad de sentirse vasco y español, la tolerancia, la pluralidad política y el constitucionalismo; todo aquello que ETA quería erradicar ».
Al término de las intervenciones y antes de realizarse la ofrenda ante el monumento a las Víctimas del Terrorismo, la militante Lola Gallo leyó un poema que ella misma escribió tras conocer la noticia de que los terroristas habían cumplido su promesa y perpetraron el crimen: «Con la sonrisa en la boca, le digo a todos los etarras, que han perdido esta batalla, porque el recuerdo de Miguel Ángel está en los corazones de todos los que aman» , concluye el poema.
Tras el mismo, los asistentes, encabezados por García-Pelayo y Bruno García, depositaron el ramo a las plantas del monumento. «Cuando gobernemos, lo arreglaremos», espetó la candidata a la alcaldía de Jerez, en alusión al estado del mismo.