El Puerto
Monchi: «En los pequeños detalles están los grandes logros»
El director deportivo del Sevilla FC ofreció las claves sobre ‘Cómo construir un equipo’, dentro del ciclo de conferencias del Aula de Cultura en el Club de Playa El Buzo de El Puerto
‘ Cómo construir un equipo ’. Bajo ese título acogía el Aula de Cultura una nueva conferencia. Al frente en esta ocasión se encontraba Ramón Rodríguez Verdejo ‘Monchi’, el director deportivo del Sevilla FC . Nadie mejor que él, el director deportivo más famoso del mundo.
El isleño, aunque afincado en la capital andaluza desde hace décadas, fue el protagonista en el Club de Playa El Buzo (perteneciente al Real Club de Golf Vista Hermosa de El Puerto de Santa María) para impartir su ponencia dentro del ciclo de conferencias que patrocinan ABC y LA VOZ de Cádiz .
La expectación era más que notable y es por ello por lo que la sala estaba completa por los 300 asistentes permitidos por las restricciones debido al Covid-19. Y el comienzo no podía ser mejor, con Monchi entrando en la sala con el himno del centenario sevillista, el del Arrebato, de fondo musical.
Presentado por un sevillista de pro, que no dudó en agradecer a la junta directiva del Sevilla FC la oportunidad de ejercer como anfitrión del evento, Juan Ollero Borrero señaló: «Sería fácil decir de una manera racional que nos acompaña el mejor director deportivo del mundo. Yo, que soy un poco pasional, diría que es el mejor director deportivo del mundo en el mejor equipo del mundo. Siente lo que hace y siente lo que dice».
A continuación no dudó en recordar una imagen: «La de la frustración del día del descenso a Segunda en Oviedo, con Monchi llorando desconsoladamente. Una fotografía que transmite pasión, identificación, afán de superación y aprendizaje». Y apostilló uno de los éxitos del Sevilla FC: « Los profesionales vienen como futbolistas y se van como sevillistas».
El éxito de Monchi está fuera de toda duda. El que fuese guardameta de CD San Fernando y Sevilla FC, entre otros, dio el paso y se hizo cargo de la dirección deportiva en el año 2000, durante el mandato de Roberto Alés, a quien no supo decir que no, en un fútbol diferente y con un club, el del Sánchez Pizjuán, en horas bajas a nivel deportivo y económico. 20 años después se puede comprobar como su trabajo es sobresaliente. Y apuntó recordando sus inicios: « Al principio no tenía ni idea sobre qué tenía que hacer ».
Y consiguió llegar a la cúspide . A las pruebas hay que remitirse: hasta su llegada a la dirección deportiva el Sevilla FC cosechó cuatro trofeos importantes. En los 20 años transcurridos desde que Monchi pasó de su papel de portero del primer equipo a director deportivo, el club de Nervión ha conseguido 10 títulos principales, el último de ellos fue la Europa League 2019/20, con Julen Lopetegui en el banquillo.
Todo ello entre 2000 a 2017 y desde 2019 hasta la fecha, con parada en Roma intermedia, donde se fue para salir de la zona de confort. «El director deportivo se estaba comiendo al sevillista, por un lado. Por otra parte, también quería crecer para no acomodarme».
«Un bilardista»
Después de definir al Sevilla FC como «un rebelde en un cortijo» , como aquel ‘Robin Hood’ que ha querido romper con la dictadura de los presupuestos, no dudó en apuntar que tenía un concepto «muy bilardista» de su vida. Por eso aseguró: «En los pequeños detalles están los grandes logros». E incluso puso un ejemplo: «Uno de mis grandes fracasos fue no evitar el ‘Caso Romaric’. Podía haber evitado el ‘run-run’ sobre su exceso de peso. Después se puso fino y le seguían diciendo gordo. Esa foto lo marcó. Somos muy dados a eso».
Por eso recalcó: «Voy a hablar de la otra parte, de la persona. Nuestro rendimiento bueno o malo está en nuestra parte humana. Desde Koundé al utillero del Infantil C todos son importantes».
Los secretos del éxito
Fue entonces cuando el isleño pasó a detallar los secretos del éxito. Y no dudó en enumerarlos como si de una alineación se tratase con aquellas habilidades blandas que son fundamentales para gestionar un grupo: liderazgo, autoestima-aprecio-confianza, autocrítica, decisión=inconformismo (sin llegar a la frustración), colectividad=trabajo en equipo, resiliencia y compromiso=pasión. Una pasión que es parte de la vida de Monchi.
En una charla que se hizo corta, entre anécdotas y anécdotas, apostilló: «Yo era un buen portero de entrenamientos, pero en partidos a veces me podía la presión. Afortunadamente, el destino me tenía preparado algo que jamás pensaba».
Antes de terminar, admitió llorar de impotencia el día que Sergio Ramos se marchó al Real Madrid. Sin embargo, «luego vino Drago y salió bien la jugada. Aprendimos el error y pudo decir que somos un club vendedor y presumo de ello. Siempre hemos sido capaces de reaccionar».
Una conferencia clara, didáctica tras la que el listón queda bastante alto. Y es que no será el último en pasar por allí en un intenso mes de agosto.
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