CRISIS DEL COVID-19
El restaurante Popeye cierra temporalmente por dos posibles positivos por Covid-19 entre sus empleados
Dos trabajadores del establecimiento han presentado en los últimos días síntomas compatibles con el coronavirus
El restaurante Popeye de Chiclana de la Frontera ha informado del cierre temporal del establecimiento ante la sospecha de que dos de sus empleados sean positivos por Covid-19 . El establemiento hostelero toma esta medida «como medida de seguridad para nuestros clientes y empleados».
«Pensamos que lo primero de todo es la salud y ser transparentes ante todo lo que pueda ocurrir en estos tiempos que nos a tocado vivir», han explicado a través de un comunicado compartido en sus redes sociales.
El restaurante chiclanero ha asegurado que todo el personal «ha estado trabajando desde el principio con mascarillas homologadas y sus manos se han lavado con una frecuencia indefinida, pero como no podemos contar con lo que sucede de puertas para afuera, cuando termina nuestra jornada laboral nadie está a salvo».
Este miércoles, todos los empleados del Popeye se someterán a las pruebas del Covid-19 para conocer el alcance de los contagios entre sus trabajadores. El establecimiento que querido dejar claro que los dos trabajadores con síntomas compatibles con coronavirus no han trabajado en los últimos días, y ha explicado que «nos vemos en la obligación de cumplir con los plazos de seguridad establecidos para la limpieza y desinfección del local para garantizar la seguridad de todos».
«Esperamos abrir en breve con la garantía y seguridad que nos caracteriza. Sentimos las molestias ocasionadas a todas las reservas para estos días . Esperamos que todo esto acabe pronto y que entre todos con nuestras acciones y responsabilidad con los demás, podamos vencer al maldito Covid-19, porque no hay otra manera», han sentenciado a través un comunicado.
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