Inmigración
Avanzan los trámites para construir el nuevo CIE de Algeciras
El actual centro fue el último en cerrar durante el estado de alarma y es, junto al de Valencia, el único que aún no ha reabierto. Más de veinte Ongs y sindicatos constituyen una plataforma contra estos centros y el nuevo proyecto
La construcción de nuevo Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) en Algeciras está más cerca. El proyecto, anunciado por el anterior ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido (PP), y retomado por el actual, Fernando Grande-Marlaska, comienza a desbloquearse. Promovido por la Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior, tiene un presupuesto de 17,2 millones de euros. Está previsto que esté listo en 2022 y tendrá una capacidad de 500 plazas.
El pasado mes de agosto, el Consejo de Gestión de la Gerencia Municipal de Urbanismo de Algeciras concedió la licencia de construcción de este CIE en una parcela cedida por el Ayuntamiento de 20.000 metros cuadrados en la zona de Botafuegos. Hace tan sólo unos días, el proyecto recibía la autorización ambiental unificada de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía.
El alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce (PP) , lo ha calificado como una buena noticia y ha dicho que situará a la ciudad «en la punta de lanza de ciudades que cuentan con este tipo de infraestructuras. Esperemos que para el año 2022 esté finalizada la construcción del nuevo, ya que han pasado muchos años desde que se impulsó este proyecto, que además generará empleo en la ciudad, con un incremento de funcionarios y puestos de trabajo estables, lo que repercutirá en el mercado laboral».
Y es que Landaluce defiende la necesidad «urgente» de disponer de un nuevo CIE dadas las serias deficiencias que tienen las actuales instalaciones, situadas en la antigua prisión del municipio y parcialmente cerradas por aluminosis, entre otros graves problemas. De hecho, la Dirección General de la Policía llegó a emitir un informe sobre la insalubridad y la falta de seguridad en el edificio, algo que vienen denunciando desde hace años las organizaciones no gubernamentales. En el actual, sólo hay capacidad para 30 internos dada la situación ruinosa que presenta.
Huelga de hambre
El CIE de Algeciras fue el último en cerrar debido a la crisis sanitaria generada por el Covid-19 y, junto al de Valencia, es el único que aún no ha reabierto. Sí lo han hecho ya los de Canarias, Murcia, Barcelona y Madrid. Por cierto, en Madrid y Murcia, algunos internos han iniciado incluso una huelga de hambre.
Ola de rechazo
Pero hay muchas voces contra este tipo de centros. Un total de 25 organizaciones no gubernamentales de la provincia de Cádiz, junto a los sindicatos CCOO, UGT y CGT, han constituido una plataforma para exigir la clausura de todos los CIEs de España y la paralización de construcción del nuevo centro en Algeciras. Hace unos días protagonizaron una protesta ante las puertas de las actuales instalaciones.
Entre sus integrantes están Algeciras Acoge, la Asociación ProDerechos Humanos Andalucía, la Red de Apoyo a Inmigrantes de Jerez Dimbali, las fundaciones Amaranta y Cruz Blanca, o Vejer Sin Fronteras, por citar sólo algunos. «Se trata de una medida desproporcionada e injusta, de escasa garantía constitucional, con un indudable carácter hostil y represivo , y una mancha en un Estado de derecho», argumentan.
Estas entidades insisten en que los CIEs no son más que «cárceles para inmigrantes» en el que personas que no han cometido ningún delito son privadas de libertad por el simple hecho de migrar con el propósito de encontrar una vida mejor o huir de situaciones de persecución o peligro.
Asimismo, denuncian que estos migrantes son encerrados en unas instalaciones que además atentan contra la dignidad del ser humano: «Con la reapertura se vuelve a internar a estas personas en espacios de vulneración de derecho y sufrimiento, además, en un contexto de pandemia mundial y de cierre de fronteras, lo cual imposibilita la ejecución de su retorno».
Por ello, apelan a que las autoridades competentes acaben definitivamente con esta medida: «La experiencia de estos años ha demostrado que estos centros son ineficaces, que suponen una medida desproporcionada ante otras alternativas mucho menos gravosas. La normativa europea no te obliga a tener un CIE ».
Estas ONGs resaltan además la grave situación del CIE de Algeciras, con resoluciones judiciales «demoledoras» sobre sus carencias y donde entidades como el Defensor del Pueblo o la Fiscalía General del Estado han solicitado expresamente, en numerosas ocasiones, «su cierre definitivo debido al estado lamentable e irrecuperable de sus instalaciones».
En contra de lo dicho por el alcalde de Algeciras, estas ONGs rechazan la construcción del nuevo CIE, que destacan será uno «uno de los mayores centros de detención de la Unión Europea».
Asimismo, aseguran que situará a la provincia de Cádiz «en un punto negro de referencia en la vulneración de derechos humanos, constituyendo una inversión económica que nos denigra como sociedad y que debería de tener como destino único la mejora de las instalaciones y servicios sanitarios, educativos, sociales o culturales, tan necesarios y beneficiosos y que crearían empleo de una manera digna y decente».
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