El Ayuntamiento y Amigas al Sur ultiman un acuerdo para abrir el comedor a los niños

La presión ejercida por las voluntarias y madres de menores beneficiarios de las ayudas alimentarias de la asociación Amigas al Sur ha tenido el resultado que esperaban.

Después de quedarse fuera del listado aprobado por la Junta de Andalucía de entidades sociales que se encargarán de garantizar los alimentos básicos a los menores gaditanos en riesgo de exclusión durante este verano, su presidenta, Pepa Fernández, ha conseguido negociar otra vía para seguir prestando el servicio.

A falta de cerrar hoy los detalles del acuerdo, el colectivo cuenta con que será el Ayuntamiento de Cádiz el que se encargue de sufragar el coste de la apertura de las cocinas y la compra de los alimentos necesarios para preparar las tres comidas diarias que se van a repartir entre los niños que formen parte de este proyecto a ejecutar por la entidad.

Esta noticia la recibía Amigas al Sur cuando sus miembros ya habían optado por poner en marcha una acción drástica, como era una acampada a las puertas del edificio de la Junta de Andalucía en la plaza Asdrúbal que comenzó a las once de la mañana de ayer y que se iba a prolongar hasta que no se les diera una solución.

Así, a pesar de que la Consejería de Igualdad, Salud y Políticas Sociales les había explicado que los motivos para dejarlas fuera de este reparto estival de alimentos eran que no estaban registradas como entidad -algo que ya se les advirtió el año pasado- y que no se había entregado la documentación para optar a la subvención de forma correcta, Amigas al Sur seguirá atendiendo un año más a más de cuarenta niños del Cerro del Moro y otros barrios cercanos.

Explica Pepa Fernández que en los próximos días continuarán los contactos con el Gobierno local para entregar la documentación relativa a los menores que van a beneficiarse de su acción, de forma que el 1 de julio se pueda empezar con el reparto de desayuno, almuerzo y cena de lunes a viernes, además de un refuerzo alimentario para el fin de semana.

Para poder desarrollar el proyecto con el menor coste posible, este mismo viernes las responsables de la asociación van a tener una reunión con las madres de los menores que van a recibir los alimentos con la intención de formar grupos de trabajo que se encarguen de la elaboración de los menús diariamente, todo ello de forma voluntaria.

Pepa Fernández apunta a que aún no se puede saber el coste que este servicio va a suponer para el Ayuntamiento de Cádiz puesto que la lista de beneficiarios no está cerrada. Hay que recordar que Amigas al Sur viene denunciando en los últimos días que más de cuarenta menores se iban a quedar en la ciudad sin la garantía alimentaria que van a tener otro buen número de pequeños que van a acudir a los campamentos urbanos de verano o van a acogerse al programa de reparto de comidas que acaban de acordar la Junta y el Consistorio para atender a unos 160 niños que forman parte durante el resto del año del Plan de Solidaridad y Garantía Alimentaria (SIGA).

Ayer mismo eran varias madres las que explicaban en la acampada de Amigas al Sur que sus hijos se quedaban fuera de este cupo por varias razones. Una era que estudian en colegios concertados, por lo que el coste mensual del comedor (unos 90 euros) es inasumibles para sus padres, que en la mayoría de ejemplos cobran pensiones mínimas; además, están los casos de los menores de guarderías o institutos que tampoco disfrutan durante el año del servicio de comedor escolar. Es a esos niños a los que se dirigirá la acción de Amigas al Sur, además de otros pequeños que ya durante el resto del año se benefician de los repartos semanales de alimentos que realiza este colectivo.

Desautorización a la Junta de Andalucía

Una vez que se confirme la decisión municipal de sufragar la apertura del comedor de Amigas al Sur, la misma se topará de frente con el criterio absolutamente contrario de la administración que tiene las competencias en esta materia, que es la Junta de Andalucía.

La delegación de Políticas Sociales trasladó ayer a representantes del colectivo «que si, tal cómo afirman a través de los medios de comunicación, alguno de los menores a su cargo han quedado excluidos para recibir el refuerzo alimentario, los servicios sociales comunitarios, con competencia municipal, con el apoyo de trabajadores sociales de la Junta pueden comprobarlo y subsanarlo». De ese tema habló directamente la delegada Mirian Alconchel con la concejala del ramo en Cádiz, con el compromiso de alcanzar una solución conjunta para cada niño. Esto, no obstante, choca con la decisión unilateral del Ayuntamiento de dar cobertura a Amigas al Sur en su pretensión.