La Fiscalía ampliará su actuación en la reyerta juvenil que evitó la Policía en Cádiz

La Fiscalía de Menores ampliará las diligencias para tratar de esclarecer la reyerta juvenil colectiva que el Cuerpo Nacional de Policía evitó el pasado viernes en los Extramuros de Cádiz, en el entorno de los Balbos y la plaza de San José. El Ministerio Público admitió ayer que ha decidido «tomar en cuenta» la petición policial de intervenir por considerar que fueron hechos «de cierta gravedad» que podrían haber originado violencia. De hecho, causaron alarma entre padres, profesores y vecinos que denunciaron con varias llamadas a la Policía la posible trifulca para la que decenas de jóvenes se habían citado por internet. Esta actuación fiscal supondrá diligencias que amplíen la investigación sobre los hechos y la información derivada de ese trabajo.

Las mismas fuentes aseguran que los identificados hasta el momento son cinco varones, de entre 14 y 16 años, con domicilio en Cádiz. Las faltas que se les imputarían serían las de «tenencia de objetos peligrosos» y amenazas.

La Policía Nacional y el Ministerio Público se han puesto en contacto también con los centros educativos (de Cádiz, San Fernando y Puerto Real) en los que estarían matriculados los menores que asistieron como potenciales participantes de la pelea o en la condición de espectadores. El objetivo es que los propios institutos puedan tomar medidas preventivas para tratar de reducir el riesgo de que se repitan los hechos.

Decenas de adolescentes, arremolinados, se desplazaban a la vez, en grupo, visiblemente alterados en la tarde del pasado viernes. Peatones, padres alertados y vecinos avisaron al ver que algunos portaban objetos contundentes. Dos patrullas, un equipo de UPR (antidisturbios) y varios inspectores de paisano adscritos a la Unidad de Familia disolvieron la concentración y evitaron lo que fuentes oficiales calificaban ayer como «una riña multitudinaria». Identificaron a cinco portadores de objetos peligrosos (cadenas, una porra similar a las utilizadas por los cuerpos policiales y un puño americano).

Sus padres fueron avisados para que se personaran y se hicieran cargo de los menores.