Alegría para todo un barrio

La alegría inunda hoy las calles del barrio de Santa María. No es Navidad pero se brinda con cava. En Plocia, la vendedora de la ONCE Dolores Núñez ha repartido dos millones de euros en 55 premios de 35.000 euros cada uno. El número afortunado ha sido el 87.250. Dolores apenas ha dormido. Desde que anoche se enteró de la noticia no ha sido capaz de conciliar el sueño. En cuanto lo supo se puso a avisar a sus clientes, a gente de todos los días, personas habituales que pasan por allí con el anhelo de ser bendecidos con la suerte de un premio. «Siento la misma emoción que si me hubiera tocado porque sé que ha sido gente que lo necesitaba.

Además se ha repartido mucho a personas que de verdad les hace falta».

Dolores lleva un año vendiendo cupones en la calle Plocia. En el kiosko reconoce que no vende mucho pero sí en su zona de influencia, en las terrazas y comercios de esta vía que tanto ha resurgido en los últimos años. Afiliada de la ONCE y con un contrato temporal comenta que «muchos me decían tú lo vas a dar porque tienes mano». Y no es para menos. Recientemente, el segundo sábado de carnaval Dolores dio una adicional de 400 euros y un sueldazo de 3.000.

Para Dolores la emoción va en aumento. Se acercan algunas de las personas que han sido premiadas y su rostro lo dice todo. Agustina vive en la Plaza de la Merced. Es una de sus clientas fijas. «Anoche me llamó y me lo dijo... estaba cenando un sándwich y no sabes la alegría que me dio». Para esta vecina este dinero llega como caído del cielo. «Es para ayudar a mis hijos. ¿Qué vamos a hacer los viejos ahora tal y como está la cosa?, pues ayudar a los hijos que están parados». Agustina vive con su marido y uno de sus hijos y también tiene una nieta. «Estoy muy contenta porque no le debo nada a nadie pero esto me va a servir para seguir para adelante».

Desde la cercana calle Sopranis, llega Anabel, de la frutería El Manojo. Anabel también ha sido una de las afortunadas pero a su vez ha repartido suerte ya que se llevó seis cupones. Se quedó con uno y los demás los adquirieron clientes de su frutería. «Estoy muy contenta porque ha sido para gente muy humilde, para personas mayores que tienen un pequeña pensión.... Esto me va a servir para tapar boquetes más que nada, para todos los días». También en Sopranis, en el Noray, Encarni estaba muy feliz por el mismo motivo. Se había quedado con un cupón y otros cuatro los había repartido. «Servirá para tapar agujeros aunque sí es verdad que me daré un pequeño capricho que es llevar a mi hija a Madrid a ver el Rey León».

Alberto Ríos, director de la ONCE en Cádiz, compartía la alegría con la vendedora Dolores Núñez y con algunos de los afortunados. «Estamos encantados con haber dado este premio. Es una gran satisfacción para nosotros devolver a la sociedad gaditana lo que nos da comprando nuestros productos todos los días».