La polémica pérgola de Santa Bárbara ya está terminada

Ha sido una de las actuaciones más controvertidas de los últimos años en la ciudad de Cádiz. La pérgola-mirador del Paseo de Santa Bárbara despertó mucha más expectación en su día que entusiasmo en la actualidad. Por fin está terminada, y aunque aún no se puede visitar, cualquiera que pase por el Paseo puede comprobar el resultado.

Habrá que esperar a verla con los cristales limpios, iluminada, con el paseo superior abierto y con el entorno finalizado para valorar si el rechazo general que ha provocado en buena parte de la ciudadanía se suaviza.

De momento, lo cierto es que Cádiz va a ganar un nuevo espacio libre y la pérgola va a favorecer el descubrimiento de unas vistas que los que ya han podido disfrutar –solo algunos privilegiados como técnicos municipales, operarios de la obra y políticos– definen como espectaculares.

La actuación está a punto de finalizar. La pérgola está lista. En estos días ya hay personal de limpieza poniendo a punto las salas que se han creado en los bajos y cuyo conjunto hace las funciones de separación y protección del parque que realizaba el anterior muro. Algunas de estas dependencias ya están incluso amuebladas y hacen las veces de oficinas.

Es evidente que el Parque Genovés gana en permeabilidad con varias puertas de acceso desde Santa Bárbara. Aún están cerradas, lo mismo que los accesos al paseo, tanto las dos trampas laterales como las escaleras centrales. Lo que sí están abiertos en los bajos de la pérgola son todos los accesos al parking subterráneo.

Se pueden ver ya también los servicios públicos y algunas dependencias que se destinarán a almacenes del personal de limpieza y mantenimiento del parque, en este caso cerrados con paneles traslúcidos, tanto blancos como naranjas.

A pesar de estar lista, la pérgola no se abrirá hasta que no se termine de arreglar el paseo. De momento se ha colocado en la entrada del mismo, por la zona de la plaza Rocío Jurado –la más próxima a la Alameda– una gran valla metálica que se cerrará por las noches, de la misma forma que ya se hace con la unión entre el paseo y la trasera del Parador Atlántico. Junto a esa puerta luce una pared acristalada con la leyenda ‘Santa Bárbara’.

Zonas ajardinadas

Ya se ha comenzado a trabajar en la adecuación de las zonas ajardinadas. En algunas ya hay plantas y se han instalado los sistemas de riego. Otras están siendo preparadas para plantar las diferentes especies vegetales. Concretamente, en la zona más próxima al Parador se han colocado grandes piedras ostioneras que conforman pequeños parterres para la colocación de las plantas.

Por otro lado, deben recuperarse los juegos infantiles que se retiraron al comenzar las obras de la pérgola. Los mismos se ubicarán en los espacios libres entre los jardines.

Algunos de estos, pavimentados con distintos colores, presentan ya numerosas grietas, algunas incluso ya recogidas y repintadas, lo que no consigue ocultarlas. En este caso, la tardanza en rematar la obra ha provocado que antes de su inauguración oficial acumule varios desperfectos.

Aunque el Ayuntamiento no da todavía una fecha para su inauguración –probablemente no sea más que una apertura sin ceremonia por los imperativos legales de la campaña electoral–, se da por hecho que el nuevo Paseo de Santa Bárbara y su pérgola-mirador van a estar listos antes del mes de mayo.