
Ingresa en prisión por agredir a su pareja y amenazar con volar la vivienda en Cádiz
El detenido, de 42 años y con numerosos antecedentes, se atrincheró en su casa tras echar a su mujer y a su bebé
Actualizado: GuardarUn vecino de la calle Tanguillos de Cádiz fue detenido el lunes tras agredir a su pareja, echarla de la vivienda y amenazar con volar la casa con una bombona de butano. Tras pasar a disposición judicial, el titular del juzgado de Violencia de Género de Cádiz ha decretado hoy el ingreso en prisión.
Durante más de cuatro horas, la Policía Nacional mantuvo acordonada la finca donde se ubica la vivienda del detenido porque tras echar a su pareja y a su hijo de apenas un mes de vida, amenazó con provocar una explosión.
Las alarmas saltaron al recibir la sala del 091 la llamada desesperada de la mujer del detenido pasadas las cinco de la tarde. Había sido agredida por su pareja sentimental, quien le había arrebatado las llaves y la había echado de la casa.
La mujer llevaba a su bebé recién nacido en brazos y no podía regresar al piso.
Varias dotaciones policiales se acercaron al domicilio, ubicado cerca del hospital Puerta del Mar. Allí se encontraron a la mujer llorando y en compañía de varios vecinos.
Según fuentes policiales, algunos de los residentes de la zona relataron que no era la primera vez que Francisco José N. P., de 42 años y con numerosos antecedentes policiales, protagonizaba un escándalo.
Un agente de la UPR contactó con el agresor por una ventana para tratar de convencerlo de que abriera la puerta y no consumara la amenaza de volar el edificio. Francisco José les advirtió que llevaba un cuchillo encima y que lo emplearía en caso de que alguien cruzara la puerta de su casa.
En un primer momento, la Policía trató de entrar con una copia de las llaves que les facilitó la mujer, pero la puerta estaba bloqueada. Así que tuvieron que acceder a la fuerza al domicilio.
Mientras organizaban la entrada con ayuda de los bomberos, desde la Comisaría habían contactado también con Francisco José por teléfono para tratar de disuadirlo. Pero no deponía su actitud y advertía a los funcionarios que provocaría una explosión en cualquier momento.
Un «fuerte olor» a gas butano
En una nota de prensa remitida hoy a los medios, la Policía describe el «fuerte olor» a gas butano que salía de la vivienda y que desencadenó definitivamente la intervención policial pasadas las nueve de la noche.
Los bomberos lograron fracturar parte de la puerta. A través del hueco, los agentes vieron que el agresor se había parapetado detrás de la puerta un televisor, un horno, sillas y una bombona de butano.
Ante el riesgo de que pudiera cumplir con su amenaza, la UPR se introdujo en la vivienda tirando de maza y protegiéndose los efectivos con escudos.
En pocos segundos, relatan fuentes policiales, pudieron reducir a Francisco José, quien portaba un destornillador. Cuando fue sacado de la casa esposado, los vecinos que durante cuatro horas habían sido testigos de la operación policial, comenzaron a aplaudir a los agentes y a increpar al detenido.
El agresor fue asistido por servicios sanitarios, que lo trasladaron al hospital Puerta del Mar para un reconocimiento más profundo. Había ingerido varias pastillas y tuvieron que realizarle un lavado de estómago. Posteriormente fue presentando ante el juez, quien decretó su ingreso en prisión hoy.
La víctima fue atendida en un centro sanitario. Fuentes policiales han confirmado que la mujer relató a los funcionarios del Servicio de Atención Familiar (SAF) que había sido víctima de malos tratos en anteriores ocasiones. Describió una relación de pareja muy deteriorada, en la que Francisco José, que es consumidor de drogas, se ausentaba habitualmente de su domicilio.