El primer ministro indio, aclamado como una estrella del rock en Nueva York

Nueva York está tan acostumbrado a recibir a jefes de Estado como el Madison Square Garden a estrellas del rock, pero ha sido el nuevo primer ministro indio, Narendra Modi, el que convirtió este pabellón en sede de un gran discurso político al más puro estilo de Bollywood. «America loves Modi», (América quiere a Modi), decían las pancartas de los asistentes, que llevaban camisetas con el rostro del mandatario. Más de 30.000 personas solicitaron las entradas gratuitas para el recinto que repartió la Fundación de la Comunidad India Estadounidense. Casi la mitad se quedó fuera, porque el evento sólo tenía capacidad para 18.000 asistentes.

Le precedieron bailarinas y otros elementos festivos muy bien entrenados por una campaña electoral que ha hecho historia en India, financiada por el sector de negocios. Modi bromeó al decir que su país ya no es conocido por los «encantadores de serpientes». «Ahora jugamos con el ratón», redondeó. Prueba de su influencia es que entre el público se encontraba el domingo una treintena de congresistas.

Ayer se reunía en el Council of Foreign Relations con once consejeros delegados de grandes corporaciones como Google, Boeing y Goldman Sachs, pero eso era sólo el aperitivo. Su itinerario incluye tomar el té mañana con el portavoz del Congreso de EE UU, John Boehner, y encontrarse con la potencial candidata demócrata a la presidencia, Hillary Clinton.