Sarkozy regresa a la política activa para intentar la reconquistar el Elíseo en 2017
PARÍS. Actualizado: Guardar«El tigre puede ponerse a régimen vegetariano pero llega un momento en que la gacela se vuelve tentadora». Nicolas Sarkozy, animal político de voracidad insaciable, hizo ayer realidad el adagio premonitorio que pregonaban sus fieles. El expresidente francés confirmó su cantado regreso a la política activa al anunciar en las redes sociales que será candidato a dirigir la UMP, formación de centroderecha que ya encabezó de 2004 a 2007. La elección interna, para la que es máximo favorito, está programada el próximo 29 de noviembre y constituye el trampolín para la reconquista del Elíseo en 2017, cinco años después de su derrota electoral ante el socialista François Hollande.
«Soy candidato a la presidencia de mi familia política», proclamó Sarkozy, de 59 años, en un texto colgado a media tarde en su página de Facebook en el que no menciona nunca las siglas de la UMP. Es la prueba por defecto de su estrategia renovadora de la oposición moderada para «transformarla de arriba a abajo y crear en un plazo de tres meses las condiciones de un nuevo y amplio reagrupamiento».
Su objetivo es «construir la formación política del siglo XXI» capaz de representar «una alternativa creíble» a la izquierda gobernante. Ese movimiento renovado «se dotará de un nuevo proyecto, un nuevo modo de funcionamiento adaptado a nuestro siglo y un nuevo equipo». Cambio de nombre, de organización y de orientación.
Fillon, su gran rival
Sarkozy había regresado de sus vacaciones en la Costa Azul con la barba de tres días afeitada, signo inequívoco para los iniciados de que el tiempo de la reflexión estaba finalizado y daba paso a la vuelta a la acción. Ni siquiera las reticencias atribuidas a Carla Bruni, su esposa, de exponerse de nuevo a los rumores elíseos difuminaron las rayas del tigre ni cortaron su apetito.
«¿Se la imagina decir 'no' a lo que hago? ¿Pediría yo a Carla que dejara de cantar?», preguntaba hace días al autor de un reportaje en Le Figaro. «Si hay alguien que participa en mi vida como yo en la suya, es ella. No tiene ningún sentido decir que está contra mi regreso», añadía antes de apuntar que Bruni piensa que debe reaccionar a «la injusticia» de las persecuciones judiciales. La UMP está dirigido por un triunvirato formado por los ex primeros ministros Jean-Pierre Raffarin, Alain Juppé y François Fillon. Este último se perfila como el rival más peligroso de Sarkozy para las presidenciales de 2017.
