LAS NORMAS DE LA CASA DEL GÜISQUI
Actualizado: GuardarLa independencia es un juego/ y un juego vil/ que no ha de jugarse a ciegas,/ pues juegas diez veces, mil.../ y de las mil ves febril/ que o te pasas o no llegas/ y el no llegar da dolor/ pues indica que mal tasas/ y eres de otro deudor./ ¡Más ay de ti si te pasas!/ ¡Si te pasas es peor! A Cameron también debió rendirle el maldito cariñena cuando confiesa desolado a 'The Times' que se despierta aterrorizado, en un charco de sudor, temiendo que gane el 'sí'. La suya es una historia infortunada. Muchos de sus correligionarios en el Parlamento creen que si pierde en Escocia su posición sería insostenible, debería dimitir y formarse un gabinete de unidad nacional que gobernara hasta las próximas elecciones. Y si se pasa, es peor.
Si gana el 'no' le espera una revuelta en el seno de su propio partido por la cesión 'desordenada' de la fiscalidad. Laboristas y tories coinciden en que las promesas como contrapartida al 'sí' que ha hecho Brown son terriblemente caras y fue investido de la autoridad de un miembro del Gobierno. Sin considerar que ante el temor al naufragio se obligó al striptease a su graciosa majestad pidiendo a los escoceses que meditaran su voto.
Una desagradable experiencia, que 'The Independent' resume en «una nación dividida contra sí misma». Ganar por la mínima incluso asusta a Salmond que reclama un voto suficiente. No es igual, pero en un un país fracturado podría encarnar el peligro del descorche de la violencia ante una decisión demasiado grave con un margen demasiado corto. Para Letta, ex primer ministro de Italia, hasta significaría un punto de ignición en la historia del país, tan dañino como el asesinato de Francisco Fernando de Austria a manos de un fanático nacionalista yugoslavo en Sarajevo que detonó la Primera Guerra Mundial.
Y aunque esta comparación parezca exagerada, no lo serían sus consecuencias: el debilitamiento de la menguante actitud proUE en beneficio del euroescepticismo, favorecería que Gran Bretaña se retirase de la UE, o que el nuevo país tuviera que pedir su readmisión en el club al que pertenecía frente al veto de Reino Unido y España, preocupada por Cataluña. «No hay nada -dice 'The Times'- en la vida de los ciudadanos escoceses o catalanes que vaya a mejorar con la independencia». De momento, se han llevado millones de libras a Escocia por si se produce un 'corralito' y la gente espantada decide retirar el dinero de los bancos.
Un famoso abogado dice que el divorcio es el infierno porque ha asistido a la lucha por la custodia de un gran danés que ha durado meses, los chicos van al siquiatra y un tipo de túnica negra decide tu destino. ¿Y qué hacer con los funcionarios y las fuerzas armadas, con los derechos marítimos y el petróleo, la BBC y las pensiones? Habrá que ofrecer a galeses e irlandeses el mismo referéndum, basado en las mismas normas de la casa del güisqui que han regido éste. Y visto de ese modo, uno comprende que los pubs vayan a permanecer abiertos toda la noche.