Isabel II pasa «horrorizada» sus vacaciones
La soberana conocerá el desenlace de la consulta en el castillo de Balmoral y teme que el reino se quiebre en la región donde creció su madre
BALMORAL.Actualizado:Si la reina Isabel II llegó a sus vacaciones estivales por carretera, es posible que se fijase en que la leve contienda de banderas en el vecindario (sólo la escocesa, voto al 'sí'; británica sola o británica con escocesa, voto al 'no'), se salda en los últimos tres mástiles con una victoria y un incómodo ultraje. En el más alto ondea la Union Jack y en los dos mas bajos, a la par, la escocesa y la del anfitrión, el hotel Hilton.
La carretera desde Aberdeen al castillo de Balmoral, residencia de verano de la reina, la única que es propiedad de su familia, comprada por el príncipe Alberto a Victoria a mediados del siglo XX, está jalonada por carteles del 'sí' y del 'no' y sobre todo por banderas. No es un despliegue intenso. La circunscripción solía ser liberal-demócrata pero en las últimas autonómicas ganó el partido independentista. En el último pueblo antes del castillo, Ballater, hay una mayoría pública del 'no'. El Hilton de los tres mástiles. El carnicero Sheridan y el vendedor de ropa y aperos campestres, Countrywear, han izado británicas junto a sus sellos como proveedores de la Casa Real. Un vecino con una mansión de ricos ha puesto en la linde del jardín, junto a la carretera, la británica. Pero otro, con una casa buena aunque más modesta, ha hecho lo mismo a cincuenta metros con la escocesa, sola.
Los medios británicos publican que la reina está «horrorizada» ante la posibilidad de la independencia de Escocia y, tenga fuentes de información genuinas o no las tenga, es natural pensar que una monarca que había celebrado la visita de Estado a Irlanda, en 2011, cerrando simbólicamente un grave pleito territorial entre vecinos que vivieron bajo la corona, vea ahora con temor la quiebra de su reino.